La vida de Krishna Yarbrough cambió por completo cuando su tío lo llevó a ver un show de The New Yardbirds en el año 1968, en la Dinamarca que lo vio crecer. Allí se daría la primera vez que quienes luego serían Led Zeppelin tocaron en vivo juntos y presenciar ese evento, haría que este hijo de un militar norteamericano y una mujer danesa nacido en París, decidiera no querer estudiar más y dedicarse a la música para siempre.
Así fue que llegó a formar Sensory System, la primera banda de hard rock nórdica, aunque su destino pegaría otro giro enorme con el furor del funk y la música negra de los 70 y 80, la cual lo encontró en New York, donde formó Yarbrough Brothers con su hermano y compartió manager con los conocidísimos Parliament-Funkadelic. El reencuentro con sus raíces cherokees le dieron su nuevo nombre de Krishna Black Eagle y esa energía de intentar volver a empezar lo llevó a Buenos Aires.
Si bien llegó al país por primera vez hace 14 años, desde hace nueve que directamente lo eligió como lugar para vivir. El hecho de pisar un escenario local lo enamoró de la pasión que tiene la gente. Además, aquí ya grabó cuatro discos. El último, Black Cherokee Legend, sale el 4 de abril y lo presenta el 20 en Bebop Club. En este repasa toda su carrera, con temas de rock, pop, funk y todas las influencias que lo hicieron quien es hoy. "Es la historia de mi vida", asegura ante BigBang.
Naciste en Francia, te criaste en Dinamarca, pero ahora sos porteño por elección. ¿Qué te enamoró de Buenos Aires?
- Un día a fines de 2009 quise cambiar mi vida. Alguien me habló de Argentina y me fui a comprar mi pasaje para Buenos Aires. Llegué y me di cuenta que me gustaba y me sentía bien. Me fui a cantar a un lugar y la gente se puso loca. Me encantó esa pasión, que haya tanta euforia. Ahí dije que iba a volver. En 2010 estuve yendo y viniendo de Europa, y así.
Llegaste a ver en vivo a Jimmy Hendrix y a Led Zeppelin, ¿cómo recordás esos momentos después de tantos años?
- Fue el inicio de mi carrera. Un tío me invitó a un concierto de The New Yardbirds. Ahí vi a Robert Plant, Jimmy Page, John Bonham y a John Paul Jones. Este fue el primer concierto en la historia de Led Zeppelin, que fue en Dinamarca. Esto fue increíble. Al mismo tiempo vi dos veces a The Jimmy Hendrix Experience. Eso fue como ver a Dios. La segunda fue dos semanas antes de que muera. Después de eso no quería estudiar más, ni ir a la escuela, sólo quería tocar la guitarra y hacer música. Pero mi padre me dijo que no, que si quería hacer eso me tenía que ir a trabajar. Entonces me fui a la mañana en la nieve y el frío danés, en bicicleta a repartir diarios para ganar dinero y comprar mi primera guitarra, una Fender Mustang. Ahí empecé a practicar sin parar. Después formé Sensory System, la primera banda de hard rock de Dinamarca, justamente una mezcla de Zeppelin y Hendrix. Hacíamos giras con Slade, otra banda danesa.
Fue una época muy dura respecto al consumo de drogas, pero vos aseguras que nunca fuiste parte de ese mundo. ¿Cómo creés que te benefició esa decisión?
- Era una época de muchas drogas. Pero yo nunca tomé nada, no me interesa. Mi droga fue la música. A mí la creación musical me pone de una manera increíble. Cuando salió la música blaxploitation en Estados Unidos, como tengo sangre negra y también cherokee, dije: 'yo necesito tocar esta música'. Ahí escuché mucho Stevie Wonder, Earth, Wind & Fire, The Commodores. Después cambié más al funk y al soul de la época. Y ahora mezclo estos dos géneros con rock. En esa época del funk estuve en New York. Con mi hermano hicimos una banda, Yarbrough Brothers, y grabamos con bandas famosas de la época como Ohio Players y Heatwave. Ahí estuvimos con el compositor de Thriller de Michael Jackson, Quincy Jones. Y teníamos a Robert Mittleman, que era el manager de Parliament-Funkadelic de George Clinton. En mi nuevo álbum hay dos canciones que compuse de esa época: Can you funk it? y Is it love.
Una de los primeros artistas que escuchaste en Argentina fue a Pappo y por eso incluiste Juntos a la par en tu repertorio. ¿Qué otros referentes de la música local te entusiasmaron?
- Cuando vine a Argentina un mozo me preguntó si conocía la música de Argentina. Ahí me mostró a un guitarrista que había tocado con BB King, a Pappo. Me encantó y después grabé en mi primer disco acá Juntos a la par con los músicos de él, el compositor del tema Yulie Ruth, y Gustavo 'El Bolsa' González. Además con el productor de Charly García y Palito Ortega, Nelson Pombal. El nuevo álbum va a salir el 4 de abril y lo grabé con él. Se llama Black Cherokee Legend y tiene tres partes. Una más contemporánea, pop, rock, soul. Además una parte de mi época funk, que no hay mucho acá, y otra parte más rock y country. Este nuevo álbum es como la historia de mi vida.
Si bien lo tuyo es el funk y algo más arriba, ¿tuviste llegada al tango? ¿Y a la música folklórica argentina?
- El baterista Fernando Samalea me mostró muchos músicos de acá, de todo. Estuve escuchando un poco de tango. Es una música con mucha pasión. Vi gente bailarlo y es muy bonito. La verdad que para venir al país desde hace 14 años, tendría que haber escuchado más. Pero me gusta, por ejemplo, Carlos Gardel. Y tengo un amigo, Héctor Mayoral, que es el que le enseñó a bailar a Robert Duvall y que me ha hecho cantar en su estudio, hace 10 años más o menos. Sobre el folklore, el Gobierno de Chaco me invitó a tocar hace cinco años, porque tengo sangre de indios cherokee. Allí me encontré con guaraníes y toqué en un festival. A la gente le gustó mucho.
Este 20 de abril te van a poder ver en vivo con tu banda en Bebop Club. ¿Con qué se van a encontrar tus fanáticos?
- Voy a hacer un show. Yo soy un showman. En el nuevo álbum hay mucho funk, soul, hay baladas y hay rock. Toda la influencia de mi vida está ahí, con un par de viejas canciones, algo de Ray Charles, James Brown y Prince. Yo bailo y todo (Risas). Es un power show. La banda son Psycho Lucas en guitarra, Sebastián Reinhold en la batería, Naza James en el bajo y Julián Álvaro en teclado y coros. Además va a haber invitados. Va a ser una fiesta.