Marcelo Iripino vive uno de los años más complicados de su vida. Después de haber perdido a su suegro, hace unas semanas el coreógrafo tuvo que ser internado de urgencia en el Hospital Británico por un grave problema en uno de sus pulmones.
Ahora, tras varios días de recuperación, finalmente recibió el alta médica.
Marcelo Iripino contó que estuvo internado por una infección en su pulmón.
"Este año fue muy atípico, porque arrancamos con cosas lindas y después cosas feas. Cae mi suegra internada, mi suegro y después el marido de mi suegra. Me quedé cuidándolos, y nunca me imaginé que de una semana a la otra me iba a quedar internado en terapia intensiva", explicó esta tarde Iripino en diálogo con Intrusos.
"Tuve una gripe muy fuerte, fui a los médicos y no tenía nada, seguí laburando como siempre. Yo no soy de tener tos, hace 11 años no tenía, y una noche empiezo a toser y me agarra un dolor en el riñón. La tercera noche me empezó a doler el pecho. Creo que fue el dolor más grande mi vida", aseguró el coreógrafo entre lágrimas.
Iripino quebró en llanto al recordar el dolor que sintió antes de ser internado.
Además, explicó que esa misma noche que sintió el dolor punzante, repentinamente también sufrió de una ataque de pánico, y sin poder controlarlo, sintió durante horas que no podía respirar. "Creí que me moría, llegué al hospital no sé cómo. El dolor era tan grande que no lo soportaba", contó.
Aseguró que fue varias veces al hospital para ser atendido, pero que en las dos primeras consultas, a pesar de que le hicieron estudios, no le encontraron nada. Como le dieron calmantes para apaciguar las molestias, Marcelo optó por seguir con su ritmo habitual de vida, hasta que en medio de un show, se dio cuenta que ya no podía más.
"Llamé a Javier Furman (kinesiólogo) y le dije que necesitaba que me salve para ir a una presentación. Tenía fiebre y me dijo que me haga una tomografía computada y resonancia magnética y me encontraron liquido en un pulmón. Así que voy al hospital y me internan. Cuando llegué, el cirujano me dijo que al día siguiente me tenían que operar", sostuvo.
Lo cierto, es que durante varios días, los médicos no supieron qué le había producido el daño en el pulmón, hasta que finalmente, detectaron que se debía a una bacteria.
Marcelo Iripino contó que debe seguir con un tratamiento para mejorar del todo.
"Yo agradezco el cariño de la gente, de mi pareja, de mi familia, fue lo mas importante porque lo necesito. Yo creo que la vida también te golpea por algo, porque me hizo ver la vida de otra manera, ahora descubrí que puedo caminar lento, pude volver a ver un árbol", declaró emocionado.
"Cada vez le tomo más valorar a las cosas. Tengo proyectos y quiero seguirlos. Nos estamos mudando con Marcelo Frezzia (su marido) y quiero adoptar una criatura. Ahora tengo que seguir mi tratamiento hasta que vuelva a ser el de siempre", cerró.