Eugenia “China” Suárez confirmó su separación de su pareja y compañero de elenco de Argentina: Tierra de Amor y Venganza (ATAV), el también actor Benjamín Vicuña. “Estamos separados en este momento, no es algo definitivo ni mucho menos, tenemos mucho amor y una familia linda, ensamblada hermosa”, confirmó la actriz en declaraciones a LAM.
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“Nuestros hijos se aman y tenemos a Magnolia también, estamos separados, pero nos tenemos mucho amor así que no sabemos qué puede pasar el día de mañana. Fueron muchos años y cosas que quedan en la intimidad, yo nunca conté muchas intimidades y Benja tampoco. Hay mucho amor y cuando hay amor todo es posible, sólo hay que sentarse a hablar y barajar”, agregó.La actriz se negó a precisar cuándo fue el último día que estuvo con el chileno. "Él se fue a trabajar a Chile, pero vino muchos fines de semana. Lo que pasa es que si no sale en redes es como si nunca hubiera sucedido. Venía todos los fines de semana para verla a Magnolia. Venía a casa y estábamos juntos".
Con respecto a los rumores de un tercero/a en discordia, la "China" fue contundente: "Sé que se ha dicho mucho. No hubo terceros en discordia. Eso sucede cuando uno no habla. Es la parte que menos me gusta de nuestro trabajo. Estoy un poco acostumbrada".
“Lo vi, lo hablé con Benja. A mí también me llamó la atención, pero creo que no lo hizo con ninguna mala intención. Fue más como una humorada”, sostuvo la actriz al ser consultada sobre el llamativo posteo de una nueva compañera de ficción de Vicuña, quien publicó una historia en Instagram en la que se refirió al chileno como una "bomba sexual" y acompañó el video con corazones.
Benja es más grande, pasó por muchas cosas en la vida. Tiene más templanza, yo soy más explosiva pero pude aprender de él en todos estos años"
La actriz en cuestión es la española Elena Rivera. "No sabe por ahí que en Argentina se habla mucho de Benjamín y de mí. Me dio pena pobre, porque tiene su novio y su historia. Ella le pidió perdón a Benjamín, le dijo que era una humorada y está todo bien".
"Tuvimos una relación hermosa, de mucho respeto y cariño. Lo adoro. Es un padrazo. Ha sido un novio espectacular, pero hay muchas cosas que tenemos que charlar y ver qué pasa", reconoció.
La decisión, de acuerdo a lo confirmado por la actriz, fue "muy dura". "A mí me cuesta mucho demostrar cuando estoy mal o vulnerable. Me cuesta mostrarme débil. En general soy 'la que puede con todo'. Más cuando tenés hijos, no te queda otra que estar bien y feliz. Pero no fue traumático. Fue todo muy charlado, muy sano. Un: 'Che, ¿qué hacemos?'. Hemos sido muy maduros los dos y cuando hay amor e hijos de por medio tiene que ser así".
Consultada sobre si había sido ella quien inició la charla de la separación, Eugenia aclaró: "Los dos, todo es de a dos en la pareja. En nuestro caso salió de los dos. Qué nos está pasando y qué hacemos con esto. Benja también tiene mucho carácter, es más grande y pasó por mucho en la vida. Es un hombre con más templanza, yo soy más explosiva; pero he aprendido mucho de Benjamín estos años y me ha sabido llevar muy bien y yo también a él. Fue mutuo".
Me enseñó a estar en familia, yo me crié con padres separados y no tenía esa costumbre. Eramos Rufi y yo y de repente pasamos a ser un montón, aprendimos a convivir, a ceder... a querer a los hijos que no son de uno"
"Me enseñó mucho. Me enseñó a estar en familia. Yo me crié en una familia muy chiquita de padres separados. Se separaron cuando yo tenía ocho años y no tuve esa cosa familiar que tal vez me hubiese gustado tener. De repente éramos Rufi y yo y pasamos a ser un montón. Con muchos perros, con una casa, con sus hijos, que los amo. Rufina ama a sus hijos y sus hijos la aman a ella".
La convivencia no fue fácil, pero la actriz remarcó en todo momento el cariño intrafamiliar. "Aprendimos a convivir y a pactar un montón de cosas. Lo que es el amor a los hijos ajenos que no son de uno, que también me han hecho crecer mucho. Por supuesto que vamos a ser familia toda la vida".
"A mí me hubiese encantado tener muchos hermanos, así que le pude dar a Rufi de alguna manera esa familia grande y numerosa que a mí me hubiese gustado tener. Ni hablar Magnolia, somos un millón".
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Consultada sobre qué esperaba de la relación a futuro, la actriz se mostró contundente: "No espero mucho, no soy de esperar mucho del futuro. Creo que lo he dicho muchas veces. Soy muy de ir paso a paso. Estoy bastante relajada con eso. No me como la cabeza pensando o calculando. Ahora estoy en unas vacaciones que me merecía y que también se la merecían mis hijas porque fue un año de mucho trabajo y si bien lo disfruté muchísimo, también hubo cosas que me perdí. Actos de Rufi, tareas del colegio que me olvidaba de hacer"."Estoy disfrutando mucho de estas vacaciones y de mi mamá. Ahora, vamos a volver a Buenos Aires y ver cómo sigue la vida", reconoció. "Benja tiene un ritmo bastante difícil de llegar, pero tiene que disfrutar. En ese sentido lo apoyé siempre y me parece que uno no tiene ni que preguntar. Soy bastante individualista en ese sentido. Es un actor reconocido y tiene la posibilidad de trabajar en muchos países y me parece perfecto. Además, tiene muchos hijos para mantener. No se puede dar el lujo de tomarse dos años sabáticos".
Consultada sobre la situación de salud del padre de Benjamín,quien dos semanas atrás sufrió un ACV en Chile, la China aclaró: "Está perfecto, fue sólo un susto por suerte. Le hicieron unos chequeos. Ya está perfecto y está en su casa. Estábamos en comunicación constante, pero por suerte se solucionó rápido. Fue sólo un susto, volvió a su casa el mismo día".