Eugenia “la China” Suárez ya tacha con ansiedad los días que faltan para el nacimiento de su primer bebé con Benjamín Vicuña, cuya fecha estimada es para mediados de febrero. Relajada y abocada al último tramo de su embarazo y a la crianza de su hija Rufina, la rubia brindó una entrevista en la que reveló detalles de la convivencia con el chileno.
La "China" reconoce que es fan del nudismo.
“Detesto las prendas ajustadas. Para que te des una idea: yo amo andar desnuda por mi casa”, reconoció en diálogo con la revista Para Ti. “Desnuda total”, sumó al ser consultada si al menos usaba ropa interior.
Atenta a las posibles críticas que podría recibir, dado que parte del tiempo convive con los tres hijos de Carolina “Pampita” Ardohain, la rubia hizo una aclaración. “Sólo ando desnuda cuando estoy con Benja y Rufina (de cuatro años). ¡Si están los hijos de Benja me visto!”, en alusión a Bautista (9), Beltrán (5) y Benicio (3).
“A veces me dice: 'Ya Chinita, ponte algo. Te ven desde la ventana'. Asegura que nunca conoció a nadie que fuera tan fan del nudismo como yo”.
De cara a su segundo parto, la actriz aclaró que no entró en la “moda” de las mujeres que están en contra de las cesáreas: “No tengo esa obsesión de algunas mujeres por el parto natural. Lo dejo en manos de Dios y de la ciencia. Rufi venía para parto natural y fui a cesárea porque tenía una vuelta de cordón y mi obstetra decidió llevarme a quirófano. Perfecto. ¡No tengo nada para objetar!”.
“¿Mirá si teniendo una buena clínica, anestesia peridural, médicos preparados para ocuparse de mi parto voy a ponerme a dar indicaciones sobre cómo tiene que nacer mi hijo?”, sumó, al tiempo que aclaró que el nacimiento tendrá lugar en la Argentina y no en Chile, como se había especulado.
La "China", Paula, Nico Vázquez y Accardi antes de la pelea.
Como íntima amiga de Paula Chaves, una de las abanderadas del parto natural, la rubia reconoció que tuvo un divertido cruce por el tema: “Ella es lo opuesto a mí, le gusta todo muy natural y el parto lo menos medicalizado posible. El otro día le dije: 'Yo no pienso parir en una pelopincho en casa, no me quieras convencer' y nos reíamos. Imaginate que ya me está enloqueciendo con la teta”.