17 Septiembre de 2018 14:38
Una debuta como directora y la otra como actriz. Nacieron en cuna de oro: una de ellas es la hija del presidente de la Nación y la otra es la heredera de una de las figuras más importantes del rock nacional. Pero por primera vez, y juntas, Agustina Macri y Vera Spinetta saldrán a escena para contar la historia de Soledad Rosas, una joven anarquista a 20 años de su muerte.
De su primer matrimonio con Ivonne Bordeu, Mauricio Macri tuvo tres hijos: Agustina (34), Gimena (31) y Francisco (28). Y salvo por la pequeña Antonia (6) -fruto de su relación con Juliana Awada- los herederos del jefe de Estado prefieren el perfil bajo. "Ellos no quieren aparecer y mantener un bajo perfil. Yo los respeto", había señalado el mandatario tiempo atrás.
Agustina Macri durante la visita al Papa Francisco.
Agustina Macri es la mayor de los hijos de Mauricio Macri. Hizo la secundaria en el Northlands School, un colegio mixto y bilingüe, con carga horaria y exigencia académica como todo colegio de excelencia. En esa institución, por ejemplo, estudió la reina Máxima.
A su vez, estudió Sociología en la Universidad de Buenos Aires (UBA) y perfeccionó sus estudios en España. Pero si bien siempre prefirió mantenerse por fuera de la escena pública, cambió de carrera y en Barcelona decidió convertirse en cineasta.
Agustina volvió al país cuando Macri ya era jefe de Gobierno: en 2008 colaboró con su padre y grabó el deterioro del Teatro Colón en su centenario, durante las obras de remodelación. Pero este 20 de septiembre tendrá su gran debut cuando se estrene “Soledad”.
Parte del rodaje se realizó en Genova y Turín.
Este largometraje está inspirado en la vida de María Soledad Rosas, a quien conoció cuando comenzó a leer la obra "Amor y anarquía", la biografía novelada de Martín Caparrós. La idea de Agustina Macri es darle voz a esta joven de 23 años que se volvió anarquista al toparse de casualidad con los squatters (ocupas) y enamorarse de uno de ellos, Edoardo Massari.
La historia de Soledad Rosas comenzó a escribirse en 1997, cuando sus padres le regalaron un viaje a Italia. En el país europeo se topó de casualidad con El Asilo, un edificio ocupado por squatters, anarquistas que ocupaban edificios abandonados. Al conocerlos, se entusiasmó y se interiorizó en el modo de vida de los anarquistas italianos.
Fue entonces que conoció a Massari, con quien se puso de novia poco tiempo después. La joven fue detenida en una prisión de alta seguridad junto a su pareja. Fue acusada de ecoterrorista, delito que nunca le comprobaron. Massari se suicidó en la cárcel y Soledad siguió sus mismos pasos: se ahorcó en la granja donde cumplía arresto domiciliario.
Para el rol protagónico de su ópera prima, la hija de Macri optó por elegir a Vera Spinetta, con quien desarrolló una gran amistad en los últimos años. “Nosotros nos amamos y amamos lo que hicimos”, escribió la hija del ícono musical junto a una postal de ambas en Instagram.
Lo cierto es que Vera Spinetta conocía la historia de Soledad Rosas y se entusiasmó al enterarse que la habían elegido para representarla en la pantalla grande. Este será el punto de partida para Agustina, quien debutará como directora y, tal vez, abandonará su bajísimo perfil.