Hacía cuatro años que la actriz española Anna Allen no aparecía en una alfombra roja. Y apenas días atrás rompió la veda reaparecido en la alfombra roja de la fiesta de los nominados de los 40 Principales en España.
Un castillo de mentiras
Pero, ¿por qué estuvo oculta durante tanto tiempo? La razón es un escándalo sin precedentes en la industria cinematográfica mundial: en el 2015, se inventó una carrera inexistente en Hollywood, llegando a poner su rostro en los cuerpos de otras personas gracias al Photoshop para fingir su presencia en eventos, sets y alfombras rojas.La carrera artística de Allen comenzó en el 2001 la serie Cuéntame Cómo Pasó, con un personaje inicialmente pensado para cuatro episodios que terminó quedándose 40. Luego actuó en otra serie, Acusados, y también en teatro.
En el 2014, mientras tanto, decidió probar suerte en Estados Unidos y viajó a Los Ángeles junto a su representante. Fue allí cuando comenzó a engendrarse la mentira. En cada uno de sus regresos a Espala, la actriz relataba supuestos logros cada vez más fascinantes: aseguró haber obtenido papeles en las series White Collar y The Big Bang Theory, y premios en Europa. En sus redes sociales, subía imágenes rodeada de famosos.
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También relató haber sido invitada a los Oscar y esa fue la mentira que terminó destapando a las demás: en Instagram, Allen mostró una supuesta fotografía suya en la alfombra roja de la gala y varios medios detectaron que se trataba de un montaje.
La hora de la verdad
Poco a poco, la construcción se fue desmoronando. Los diarios de España descubrieron que la actriz había robado imágenes de estrellas como Keira Knigthley y Sophia Bush para "pegar" su rostro en ellas y hacerle creer al público que se codeaba con la creme de la creme hollywoodense.Como respuesta, Allen eligió el silencio total. Borró sus perfiles en redes sociales y simplemente desapareció del mapa. Hasta que la serie Paquita Salas la sacó de la oscuridad y de manera espectacular: con un papel autorreferencial.
En la tira -que puede verse en Netflix- la actriz Clara Valle (Claudia Traisac), representada por la protagonista Paquita Salas (Brays Efe), vive oculta en un pequeño pueblo español luego de que se descubriera que se había inventado una carrera falsa en Hollywood.
En al último capitulo de la tercera temporada, la joven cineasta Belén de Lucas (Anna Castillo) escribe y dirige una película inspirada en la historia de Clara. Y, para interpretarla, elige a Susana, una actriz encarnada nada más y nada menos que por Allen.
Palabra propia
Así, en la piel de Susana, Anna encara un conmovedor homenaje en uno de los ensayos previos a la filmación. "¿Qué hago ahora? ¿Qué harías tú en mi lugar? ¿Qué puedo hacer? Porque estoy rota. Porque ya nadie atiende el teléfono cuando llamo. Se han olvidado de que soy una buena actriz. La pregunta importante no es por qué me pasó lo que me pasó, sino qué voy a hacer a partir de ahora", expresa mirando a la cámara.