15 Junio de 2021 17:56
En febrero, tras doce días de internación, Karina Gao -la chef del ciclo televisivo Flor de equipo- salió del coma farmacológico inducido a causa del coronavirus. La joven había contraído COVID-19 y su cuadro respiratorio se complicó a causa de una neumonía bilateral. Por tal motivo, necesitó ser intubada el pasado 5 de febrero. En aquella oportunidad, les pidió a sus fieles seguidores que recen por ella y contó que la iban a inducir en un coma. "No sabemos cuándo me voy a despertar. Recen por mí, por favor”, escribió. A partir de ahí, sus familiares decidieron mantener en la intimidad los partes médicos sobre la evolución de la salud de la también influencer de 36 años, cuya internación causó impacto entre sus seguidores.
A tres meses de aquel acontecimiento y luego del nacimiento de su tercer hijo, al que bautizó con el nombre de Teo, Gao reapareció en el ciclo que conduce Flor Peña por la pantalla de Telefe. “No puedo creer que hoy la vamos a tener de invitada y esperemos que prontamente la tengamos de nuevo con nosotros. Es la mejor noticia tenerla acá, la extrañamos muchísimo, rezamos tanto por ella....con nosotros, ¡Karina!”, la presentó entre lágrimas la conductora.
Y agregó: “Qué emoción tenerte acá, este virus que no nos deja abrazarnos, pero te daría un abrazote enorme. Todo este equipo, tanto los que estamos delante de cámara como los que están detrás, pensamos tanto en vos, rezamos tanto, queríamos tanto tenerte de vuelta”. Ya sentada, conmovió al revelar que a sus hijos, Simón y Benjamín, les grabó un video antes de ser inducida al coma por las dudas de que no pudiera superar el difícil cuadro de salud.
Eugenia Tobal sobre su rol como mamá: “Me encontré mucho más relajada de lo que me imaginaba”
Afortunadamente, los chicos no tuvieron que ver aquel video. "A los chicos les grabé un video en el que les pedí perdón por no poderlos acompañar en la vida. Esa es la parte que me molestaba, en un momento dije 'bueno les grabo un video para cada situación' pero yo estaba con todos los tubos y no era tampoco muy fácil. No pude volver a ver los videos”, contó.
De acuerdo con sus dichos, el período de recuperación resultó largo y tedioso, luego de haber permanecido durante mucho tiempo recostada en una cama. “Me costó volver a cocinar porque los músculos se me atrofiaron, entonces no tenía fuerza, no podía pararme. De hecho los primeros días se me caía el celular encima porque no tenía fuerza. La voz también, recién ahora puedo hablar bien”, explicó.
En esa línea explicó cómo fue evolucionando su cuadro de coronavirus: “Hasta el día anterior a que me intubaran, me fui en modo vacación porque estaba aislada, sin los pibes, me leí todos los libros, no lo tomé mal. Jamás pensé que iba a pasar lo que me pasó, porque todos los días creía que iba a mejorar”. Y con respecto al pequeño Teo, contó que se encuentra muy bien de salud: “Está bárbaro, no me puedo ni quejar porque es un santo. Aunque de noche tiene mucho cólico”.