18 Abril de 2025 12:27

Elizabeth "La Negra" Vernaci está acostumbrada a decir lo que piensa, con su sello, con su tono, con esa mezcla de acidez y ternura que la caracteriza. Pero esta vez no fue una humorada la que la llevó a hablar. Fue la necesidad de defender su nombre, su historia y su dignidad frente a una situación que calificó sin vueltas como "una bizarreada descabellada y ridícula". La locutora y conductora radial fue una de las mencionadas en el marco de la denuncia por una supuesta red de pedofilia que habría presentado Viviana Canosa ante la Justicia, y cuya existencia fue mencionada al aire por el periodista Tomás Méndez.
La indignación de Vernaci no es impostada. Arrancó su programa en La Pop 101.5 con un potente descargo, sin especulaciones ni eufemismos: "¿A quién se le ocurre? Alguien se levanta una mañana y dice, a ver, ¿a quién jodemos hoy? No creo que esto sea por maldad nomás, detrás de esto hay algo más grande, más oscuro. Yo no tengo amigos en el poder, no conozco jueces, fiscales, periodistas operadores. No estoy en ese mundo. Y gracias a Dios".
La Negra se preguntó qué hay detrás de semejante señalamiento mediático, y deslizó que quizás el verdadero objetivo es disciplinar a "las travestis, los putos, las minas independientes que opinamos y que encima somos amigas de los putos". A la salida de la radio, Vernaci redobló la apuesta frente a las cámaras: "Vos ves un videograph que dice 'trata', 'Comodoro Py', 'implicados', y tu cara al lado. Ahí dejás de pensar que es solo una bizarreada. Hay una familia detrás, amigos, personas que no pueden creer lo que ven. ¿Cómo alguien puede, sin conocerte, insinuar que sos algo tan aberrante como un pedófilo? Eso no se puede permitir. Y debería tener castigo".
Firme, sin titubeos, la Negra confirmó que iniciará acciones legales contra todos los que hayan difundido información falsa. También remarcó algo que muchos en el ambiente vienen señalando: que ni siquiera los abogados de los involucrados pudieron acceder a la supuesta causa, lo que alimenta la sospecha sobre quiénes realmente tienen acceso a esa información. "No sé cómo algunos ven causas judiciales cuando los abogados todavía no pueden. Yo no conozco a nadie que tenga ese tipo de llegada", remarcó.
Pero más allá del plano judicial, Vernaci habló desde la herida emocional que deja ser manchada con una acusación tan grave. "Estamos hablando de algo que no haríamos ni como chiste. Primero, porque nunca en la vida tuve nada que ver con abusos o con niños. Nunca. Segundo, porque ni siquiera en nuestras reuniones más informales, en una comida, se nos ocurriría algo así. Nos reímos, hablamos pavadas, sí, como cualquiera. Pero de ahí a esto, hay un abismo", manifestó.

Consultada por su relación con Viviana Canosa, quien tiempo atrás se había comunicado con ella cuando ambas atravesaban un cáncer de mama, Vernaci fue clara: "No somos amigas, pero me pareció un gesto muy humano de su parte. Por eso esto me descoloca aún más. No creo que esto lo haga solo por maldad, sinceramente. No sé si la están usando o si se dejó llevar. No estoy en su cabeza. Y bastante tengo con estar en la mía".
Sobre los videos del pasado que reflotaron para justificar la denuncia -uno de Lizy Tagliani en un show de hace décadas, otro de Canosa con Camilo García y comentarios inapropiados sobre Luisana Lopilato, por entonces menor de edad-, Vernaci también fue categórica: "No podemos crucificar hoy a alguien por el humor de hace 25 años. Era otra época. Yo no avalo esos chistes, y jamás hice uno así, porque además a mí me pasaron cosas cuando era chica. Pero hay que entender el contexto de cada época".
La Negra habló también con el resto de los mencionados: Flor Peña, Humberto Tortonese, Betular, Lizy Tagliani, Costa. "La palabra que usamos todos es: no puede ser. No hay forma de entenderlo. Pero cada uno tiene su abogado, y veremos si también hacemos algo colectivo". Con la templanza que solo da una carrera construida sin arrodillarse ante nadie, Vernaci cerró la jornada con una reflexión que es a la vez advertencia y reclamo: "Hay que dejar de hablar en potencial. No es habría, hubiese, podría. Si vas a decir algo tan grave, hacelo con nombre y apellido, en presente, con los huevos que se necesitan para hacerse cargo. Y si no, callate".

Mientras tanto, la justicia deberá determinar qué hay de cierto -si es que hay algo- en esta escandalosa denuncia. Y si no lo hay, también tendrá que ocuparse de algo igual de importante: que las consecuencias de mentir y difamar no salgan gratis.