Para ingresar a la casa de Gran Hermano los participantes deben pasar por un doble par de puertas espejadas. Una vez que ingresaron se cierran de forma magnética. Pero parece no ser suficiente.
Esta edición del reality quedará en la historia por muchos motivos y. entre ellos, sin dudas, será recordada por ser la que más jugadores desearon irse, en su mayoría por no soportar el juego. Como si fuera poco, esto implicó que ingresen nuevos participante en medio de la competencia producto de repechajes entre los que salieron de la casa En una suerte de “puerta vaivén”, entran, salen y vuelven a entrar al reality.
Francisco, out
En la gala de ayer Francisco Delgado dejó la casa. Sus motivos fueron varios: la salud de su madre, las ganas de ver a su hija pero ante todo su salud mental por no soportar más la convivencia con su “enemigo” Mariano Berón, entre otras cuestiones que enfrentaron en las últimas semanas.
“Ya sé que es un juego y que Mariano debe estar festejando porque me voy por la puerta grande, porque nunca me podría haber sacado él. Se que también Matías debe estar festejando.. No puedo convivir con gente que defeca en un plato, que me agrede físicamente”, aseguró Francisco Delgado, antes de cruzar las puertas para no volver.
Francisco en el momento en que anunciaba su decisión de irse del reality.
Su partida sorprendió a medias. En otras oportunidades había amenazado con irse, sin contar con sus salidas esporádicas para asistir al nacimiento de su hija y el registro legal de Helena, y si bien siempre regresó, ya no más.
La situación de que un participante deje el reality no es nuevo. Nadia Terrazolo fue la primera en salir de la casa. La joven madre de un niño de siete años entró a la casa con la idea de ser mediática y mejorar su carrera de modelo. En los primeros días contó su fuerte historia de vida, ya que habría sido obligada a abortar, pero a los pocos días comenzó a consultar en el confesionario si podía abandonar la casa.
Sus compañeros notaron su angustia, la nominaron y, pese a enfrentar a Francisco, quien en ese momento no contaba con aceptación del público, la rubia se fue.
Luego siguió Camila Cortese, quién fue violada junto con su hermana gemela a los 15 años y quien siempre marcó su carácter fuerte en el juego. Tras varias peleas con sus compañeros quiso irse de la casa y luego de que Gran Hermano le ofreciera una semana para que reflexiones, declinó su decisión. La semana siguiente el público eligió sacarla del juego.
Valeria Licciadi también la pasó muy mal y dudó en su permanencia en la casa al sentir incomprensión por su identidad sexual. Pero sin querer perder las ganas de querer ganar el juego siguió hasta que fue eliminada por el voto telefónico.
Otro caso más. Mariano Berón decidió irse para arreglar sus problemas legales debido a haber sido denunciado por una “supuesta estafa”. Luego en un repechaje logró volver al juego.
Incluso Marian Farjat dudó en irse. Pese a que su indecisión surgió en el momento justo en el que vivía un romance a pura pasión con Brian, la joven que vive en un country tenía planificado un viaje a New York y que no quería perdérselo. Claro que estas dudas “frívolas” fueron superadas y continuó en el juego.
Su ex enamorado, Brian Lanzelotta, no fue la excepción. Quiso irse por extrañar a la familia, luego se mantuvo en la casa. Semanas después ya no soportaba las peleas con Marian, y todo estalló en una noche de fuertes discusiones en donde hubo una situación de violencia con su ex pareja. Brian forzó las puertas y se fue de la casa, por lo que la producción debió contenerlo y pedirle que regrese. Al día siguiente, Jorge Rial le comunicó que había sido expulsado.
Por otro lado, sin soportar extrañar a Maypi, Nicolás Conte, el santiagueño enamoradizo abandonó el juego luego de anunciar su deseo de partir hace varias semanas.
Pero no todas son huídas, también algunos que se fueron por decisión del público volvieron en repechajes, como es el caso de Matías.A su vez, ingresaron participantes nuevos en pleno juego.
Angie, Florencia y ahora los hermanos de Marian y Brian; Yasmin y Eloy son las nuevas incorporaciones al reality. Todo quieren ganar, no importan cuántas semanas pasen, la casa colapsa y ganará el más fuerte. Lo cierto es que es la edición donde más idas y vueltas mostró, siendo un juego cada vez más dinámico, intenso y atrapante debido a la telaraña que tejen en cada estrategia desplegada ante cada cambio. Y aún quedan varias semanas para que todo pueda cambiar, otra vez.