17 Marzo de 2016 08:39
Con un tono más sereno, sin rencor en el timbre de voz y con una sensación de paz. Así se lo escuchó a Matías Alé durante la entrevista telefónica que le realizó Jorge Rial en su ciclo radial Ciudad Goti K, por radio La Red.
"No tengo rencor ni resentimiento, no tengo un mal recuerdo
“Ya está terminada esa etapa, estoy caminando hacia adelante, y a María un eterno agradecimiento mientras estuve internado: toda la situación del brote (psicótico) la sobrepasó”, afirmó el ex de media farándula argentina y agregó: “No tengo rencor ni resentimiento, no tengo un mal recuerdo. Estoy en un proceso donde no me hago malasangre, tal vez sea por la terapia”.
"Estoy en un proceso mío para reconstruir a Matías, necesito estar sólo, necesito no estar con nadie
A pesar de todo el escándalo mediático en el que quedó envuelto, Matías no tiene un mal recuerdo de la que fue su esposa los últimos cinco meses. “A María la recuerdo con mucho cariño, mucho amor... ¡pero mucho amor! Me casé totalmente enamorado y para toda la vida. Ella me ayudó muchísimo y no la responsabilizo en nada. Ella tendrá en su conciencia lo que hizo bien y mal”.
Se casaron el 1 de octubre del año pasado, luego él tuvo un brote psicótico que lo llevó a estar internado; ahora se separaron
Luego, el actor se quebró durante la charla y con la voz cortada por el llanto sostuvo: “Un mes y pico atrás estaba muy enojado conmigo mismo: creía que por el brote había arruinado todo, mi matrimonio, mi carrera... Pero ahora me amigué conmigo mismo. Del enojo pasé a comprender por qué me pasó todo lo que me pasó. Y hoy estoy de pie y me siento fuerte, y estoy con ganas de empezar de nuevo”.
Ningún familiar de Matías asistió al Registro Civil.
También, Matías analizó cuales habrían sido los motivos de su brote, y aunque aclaró que en las tres sesiones de terapia semanales que hace por semanas aún no se abordó del todo el tema, aventuró: “Me di cuenta que no tengo que agradarle a todo el mundo. Me salía naturalmente, y no me daba cuánto del esfuerzo hacía. Estaba siempre un poco más arriba del estado natural, y muchas veces la gente me decía que parecía que estaba drogado”.
Matías sostuvo que como se siente mejor y que como poco a poco está volviendo a trabajar, todo el mal trago vivido durante los últimos meses va quedando en el pasado. Sin embargo, contó que la filtración de los videos suyos en pleno brote no le cayó muy bien. “La pasé mal, y el que los haya tendrá que vérselas con el karma. Aún no lo terminé de digerir porque desde hace seis meses que vivo cosas nuevas”, explicó.
“De todo lo que pasó, no me siento golpeado. Quizás es por los médicos: voy a terapia tres veces por semana y al psiquiatra. Quizás en otro momento me habría pegado peor. Hoy dejo que cada uno haga su camino y haga lo que pueda. Yo tengo el cariño de la gente”, reconoció.
Alé remarcó que el sábado volverá a trabajar en una presentación en un boliche de Ramos Mejía y que ya firmó un precontrato para volver a hacer teatro. Para juntar fuerzas y comenzar todos los días cargados de ganas, confesó que todas las mañanas escucha la canción Eye of the tiger, de la película Rocky.
Además, inusual en él, juró que está sólo y que no necesita a nadie en éste momento a su lado: “Estoy en un proceso mío para reconstruir a Matías, necesito estar sólo, necesito no estar con nadie”, explicó antes de hablar de su encuentro casual con su ex, la vedette Sabrina Ravelli: “nos pedimos disculpas mutuamente. Fue algo casual, pero al mismo tiempo muy productivo”.
“Me di cuenta que no tengo que agradarle a todo el mundo. Me salía naturalmente, y no me daba cuánto del esfuerzo hacía. Estaba siempre un poco más arriba del estado natural, y muchas veces la gente me decía que parecía que estaba drogado
Alé prosiguió enumerando sus cambios, en los cuales remarcó que se quiere mudar del country “San Miguel de Gisho” a Capital Federal porque le queda “a trasmano todo”. “Estoy con un montón de cambios que me están haciendo muy bien, pero despacio”.