Pasaron ya 22 años de la madrugada en la que Diana Spencer falleció después de que el Mercedes en el que viajaba se estrellara contra uno de pilares del Puente del Alma en París. Esa noche, la princesa de Gales viajaba junto a su flamante novio, el millonario Dodi Al Fayed, quien murió en el acto, al igual que el conductor, Henry Paul. Sólo sobrevivió el guardaespaldas de la pareja, Trevor Rees, quien desde entonces se negó a hablar de lo que sucedió y acusó tener amnesia para evitar el asedio mediático. Pese a que la investigación francesa y la siguiente causa que se desarrolló en Inglaterra concluyeron que se trató de un accidente, aparecieron ahora dos nuevos testigos que desacreditan por completo la versión oficial.

Los testigos, Robin y Jack Fireston, dieron su primera entrevista al tabloide británico The Express e hicieron pública su intención de ponerse en contacto con los hijos de Lady Di, los príncipes William y Harry. "Segundos después del choque, habían dos autos oficiales extraños y mal estacionados delante el Mercedes en el que viajaba Diana. Al otro día fuimos a la Policía a declarar y dijimos lo que habíamos visto pero el oficial ni quiso escucharnos, dijo que tenían suficientes testigos. Nos quedamos estupefactos. Matan a una de las mujeres más famosas del mundo y no quieren hablar con testigos", denunciaron.

Segundos después del choque, habían dos autos oficiales extraños y mal estacionados delante el Mercedes en el que viajaba Diana"

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"Esperamos que algún día William y Harry quieran asumir la responsabilidad de saber qué le pasó a su madre realmente", advirtieron, en línea con la denuncia pública que realizó Roberto Devorik, el amigo argentino de la difunta princesa, quien manifestó en más de una oportunidad sus dudas con respecto a la versión del accidente y llegó a declarar en la investigación que tuvo lugar hace pocos años en el Reino Unido. "Nunca entendí por qué tardaron 45 minutos en llevarla a un hospital. La Policía apareció treinta minutos después del accidente. No creo que fue la persecución de los fotógrafos lo que causó el accidente".

Las últimas palabras de Lady Di antes de morir

Xavier Gourmelon fue el primer bombero en llegar al lugar y asistir a la princesa británica. Tenía 30 años y no sabía que, en efecto, estaba tratando a un ex miembro de la familia real inglesa. “Estábamos muy cerca y nos tomó menos de tres minutos llegar. Mi equipo de diez hombres estaba en dos camiones y nosotros fuimos los primeros en arribar. El automóvil estaba destruido y comenzamos a trabajar como cualquier otro accidente. Empezamos a ver quién necesitaba ayuda y estaba vivo”.

"La mujer, de quien supe luego que se trataba de la princesa Diana, estaba en el piso, en la parte de atrás. Se movía muy despacio y pude ver que estaba viva. Noté que tenía una lesión leve en su hombro derecho y, más allá de ello, nada significante. No había sangre en ella en absoluto", reveló al tabloide The Sun.

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Gourmelon se quedó junto a la princesa hasta que llegó la ambulancia. "Tomé su mano y le dije que se calmara, que estaba allí para ayudarla y ponerla a resguardo. Ella me dijo: 'Dios mío, ¿qué ocurrió?'. Le di algo de oxígeno, y mi equipo y yo estuvimos a su lado mientras era sacada del automóvil”. Esas fueron las últimas palabras de Lady Di.

"Estábamos preparados para primeros auxilios y noté que ella estaba sufriendo un ataque cardíaco y que había dejado de respirar. Masajeé su corazón y unos pocos segundos después volvió a respirar. Fue un alivio porque, como primeros en responder, quieres salvar vidas. Y eso fue lo que pensé que había hecho". La princesa, de por entonces 36 años, falleció horas después en el Hospital de la Pitié-Salpêtrière luego de sufrir un tercer paro cardiorrespiratorio.