B.B. King, “El rey del blues” que murió el 15 de mayo a los 89 años, podría haber sido asesinado. Eso comenzó a investigar la Policía de Las Vegas y de Nevada, después de que su familia revelara sus sospechas de que fue envenenado.
“Creo que mi padre fue envenenado y que se le administraron sustancias extrañas. Lo repito: creo que mi padre fue asesinado", dijeron Karen Williams y Patty King en declaraciones que publicó la agencia The Associated Press.
B. B. King y “Lucile”, su mítica guitarra.
El móvil
Las sospechan apuntan a que la administradora de los negocios de King, LaVerne Toney, y su asistente personal Myron Johnson, mataron al legendario artista por un móvil económico. La oficina del médico forense del Condado Clark, en Nevada, dijo en un mensaje en Twitter que se había hecho cargo de la jurisdicción sobre la muerte de King y que los resultados de la autopsia tardarían un mínimo de seis a ocho semanas.
Una de las hijas del rey del blues llora sin consuelo durante el entierro.
"Nuestro forense tomó la jurisdicción sobre el cuerpo de B.B. King, llevará a cabo una autopsia. Resultados: de 6 a 8 semanas mínimo", dijo. La investigación se hará junto con el Departamento de Policía de Las Vegas.
B.B. King admiraba a Pappo. “Es el mejor”, decía del músico argentino.
Las hijas del músico también sostuvieron el entorno de su padre impidieron a los familiares de King visitarlo en sus últimos días.