04 Noviembre de 2015 18:26
La farándula está poblada de personajes y sus circunstancias. El famoso -como todos- viene acompañado de su familia, y muchas veces los parientes terminan siendo igual o más excéntricos, llamativos, pintorescos o destacables que las propias celebrities.
Muchas veces, incluso, se terminan convirtiendo ellos mismos en “sujetos televisivos”. Y las mamás mediáticas son una categoría que suele cobran vida farandulera muy rápido.
Marila es la mamá de Fernando Burlando, y este año oxigenó a la tevé con su frescura.
Este año, los televidentes conocieron a Marila, la mamá del abogado Fernando Burlando. Fiel compañera de su hijo en “Bailando por un sueño”, la señora fue protagonista de su propio espacio.
Besó a Marcelo Tinelli, contó acerca del ACV que sufrió, criticó al jurado y brindó entrevistas como una celebridad. Así fue que su hijo, el participante inicial del certamen de baile, muchas veces fue partenaire de las excentricidades de su madre, que llegó a mostrar una foto junto a un stripper. Un personaje nuevo que refrescó la pantalla.
La madre del abogado mediático conquistó a todos desde la pantalla.
Otros personajes que pasaron por “Bailando por un sueño” cumplen la lógica de la madre famosa, pero al revés. Primero fue famosa la madre, y luego los hijos la superaron en excentricidad y desparpajo, tanto que se convirtieron en mediáticos. Su mamá, Mariana Nannis, volvió a Marbella -su lugar en el mundo- silbando bajito.
Los mellizos Charlotte y Alex Caniggia se robaron los minutos y el rating del certamen de baile. Ellos sí aprendieron todo de su madre. Alex se convirtió en una parodia de sí mismo. Instalado en España, se regodea en su Instagram de la vida de lujo que lleva. Su frase favorita es #SiempreAlTop y tiene una legión de fanáticas. La chica, en cambio, se sometió a incontables cirugías estéticas y luce una pechera descomunal.
Hey a todos les mando un saludo muy grande ??????????????????? #siemprealtop #AC #highsociety
En el recuerdo
Betty Olave es la mamá de un ídolo de masas como fue “El Potro” Rodrigo Bueno.
Otra mamá que deslumbró audiencias fue Betty Olave, la madre del fallecido cantante Rodrigo. A fines del siglo pasado, se convirtió en una celebridad. Envuelta en la vorágine que acompañó el furor por El Potro, Betty fue un personaje en sí mismo. Notas, entrevistas, opiniones, bailes y declaraciones explosivas. Hoy, a 15 años de la muerte de su hijo en un accidente, lo sigue llorando y recordando.
En 2015, la vida la encuentra con un perfil más bajo apuntalando la carrera ascendente de Ulises Bueno, hermano menor del Potro, quien con su hit “Dale, vieja, dale” pretende emular el éxito de su hermano. Siempre bajo la atenta mirada de mamá.
Otra mamá que sufrió la peor de las pérdidas y potenció su rol de celebrity es Martha Fort. La progenitora del recordado y excéntrico millonario también cobró vida propia.
Cantante lírica y de tangos, Martha tardó en aparecer en los medios. Al principio las luces fueron todas para su hijo. Eso sí, una vez que vio la luz de las cámaras, Marta las disfrutó. En parte gracias a su talento para la música, en parte por la exposición full time del bueno de Richard, que la incorporó a su reality. De pronto, la tele naturalizó la presencia de Martha Fort, quien repartió en forma gratuita CD's de su autoría en el funeral de su hijo para que los fans pudieran atesorarlos.
Marta Fort es una reconocida cantante lírica y de tangos. Su hijo le permitió lucirse.
Por el mundo
Jackie Stallone es la madre de Sylvester, tiene 92 años y es una estrella.
La mujer lleva gastados alrededor de 30 mil dólares en cirugías faciales.
Jackie Stallone es la mamá de Sylvester, y muchos la definen como “La Reina de las Cirugías”. La mujer lleva gastados 30 mil dólares en retoques faciales. Es un personaje en sí misma, invitada permanente a programas de televisión. Tiene 92 años y se sigue vistiendo con faldas bien cortas y escotes profundos.
La madre de Sly visita a su cirujano una vez por semana, y ya se hizo cirugías de nariz, de frente, de mentón, de ojos, estiramientos faciales, rellenos con Botox, corrección de ojeras y de arrugas, y aplicación de colágeno en pómulos y labios.
