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¡Le rompió la ñata! La piña que le pegó Justin Bieber a un fanático

El ídolo teen volvió a dar la nota, y no por su música: en España le pegó un fan que intentó saludarlo.

23 Noviembre de 2016 10:49
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Una vez más, Justin Bieber es noticia por sus escándalos debajo del escenario (uno más y van...): el canadiense de 22 años le pegó una trompada a un fanático que se acercó a su auto e intentó tocarlo.

El hecho violento sucedió en la ciudad de Barcelona, España, en la entrada del Palau Sant Jordi, lugar donde más tarde realizó su show. Justin llegó con la ventanilla baja, y el fanático se acercó en cuanto lo vio.

Lo cierto es que vaya uno a saber si a propósito o descuidado, el fan metió su mano, le tocó la cara y el cantante pop le arrojó una trompada que dejó su devoto seguidor con la trompa ensangrentada.

"Le he tocado la cara y me ha pegado un puñetazo", dijo el agredido, sin entender bien qué había pasado.

El niño escándalo

No es la primera vez que Bieber protagoniza un hecho violento: sin ir más lejos, en 2013, durante su último paso por Argentina, le ordenó a sus patovicas que atacaran a un fotógrafo que lo captó saliendo de un boliche porteño luego de haber abandonado el escenario en el show que dio en River, dejando a miles de fanáticos llorando de la decepción.

Pero volviendo al incidente con el fotógrafo, Justin no la sacó gratis: el agredido le inició una causa y el cantante pop debió prestar declaración indagatoria ante la Justicia española acusado de agresión, robo de teléfonos celulares, privación ilegítima de la libertad y lesiones.

El cantante canadiense, adicto a los escándalos.

Todo ocurrió el 9 de noviembre de 2013, luego de que el popular músico canadiense asistiera al boliche INK, del barrio de Palermo. A la salida, las fanáticas se acercaron a tomarle imágenes y el músico le ordenó a su custodia que les quitara los teléfonos celulares con los que tomaron las fotografías. Luego, un fotógrafo del boliche que también le tomó fotos fue agredido y golpeado.

La indagatoria finalmente fue el 11 de agosto. Bieber estuvo en Los Ángeles junto a su abogado, y enfrentó a Matías Morla, el letrado del boliche INK -afectado por el comportamiento del teen idol- y del fotógrafo agredido, Diego Pesoa. En la sala de conferencias de Comodoro Py estuvo el juez en lo criminal, Alberto Baños, quien dispuso la medida. El diálogo fue por videoconferencias.

Morla detalló a BigBang que la causa investiga los delitos de lesiones, robo calificado y privación ilegítima de la libertad. “Él le pidió a los custodios que le quitaran los teléfonos a quienes sacaron las fotos. Cuando vio que además había un fotógrafo tomado imágenes, su custodia lo llevó a la esquina y le pegaron”, explicó.

Matías Morla explicó a BigBang cuáles son los delitos de los que acusan a Justin Bieber.

El abogado cuestionó la primera etapa de la investigación judicial. “Se manejó muy mal desde el principio”, sostuvo, y aclaró: “El señor Bieber tomó una actitud reticente, se presentaron a identificarlo y él no bajó ni cuando fueron a buscarlo al hotel. El juez correccional hizo mal las cosas y le permitió el egreso del país”.

Todo comenzó tras la salida de un boliche en el barrio porteño de Palermo en noviembre de 2013.

Para Morla la causa tomó impulso al pasar a la Justicia criminal. “Hubo un doble criterio: un juez ordenó indagarlo en su despacho en la Argentina y ordenar la captura internacional. Y la Cámara tuvo otro criterio y aceptó indagarlo por videoconferencia en Los Ángeles”, explicó.

El músico fue indagado finalmente el 11 de agosto en Los Ángeles.

De todos modos, Bieber había solicitado postergar la declaración indagatoria porque tenía en una gira. De hecho, el 13 de agosto tenía una presentación en Japón. Pero el juez no aceptó, con lo cual el autor de la popular canción Sorry tuvo que estar presente cuando el magistrado lo notificó los delitos que se le imputan.