Los Simpson siempre le toman el pulso a la realidad, tamizado con humor e ironía. No en vano hace casi 30 años que está en el aire y sus fans, multigeneracionales, son más que fieles.
En este caso, otra vez, se metieron en política, más específicamente en la campaña electoral de EE.UU. Y por lo que se ve, ya decidieron su voto, más allá de repartir palos por igual a Hillary Clinton y a Donald Trump. Y de rebote, la ligó Bill Clinton, uno de los personajes políticos más ridiculizados en la historia de la saga junto con el blondo magnate (ver gag referido a su peinado, imperdible).
En este capítulo "electoral" se ve a Homero viendo un comercial en TV el que el narrador le pregunta a la audiencia quién les gustaría que contestara el teléfono en la Casa Blanca, Hillary Clinton o Donald Trump.
Hacen un llamado y Bill Clinton responde exultante, aunque luego cae en que no era para él sino para su esposa Hillary, quien le aclara que a partir de ese día todas las llamadas serán para ella.
A lo largo del capítulo también se revela el secreto de la cabellera dorada de Trump, además de satirizar los comentarios xenofóbicos y racistas del candidato, hasta llegar al punto donde todo los problemas que se le presentan los quiere resolver construyendo muros.
Bonus track: Homero contra el poder
Pero no fueron los únicos: el ex presidentes Carter, Ford y Bush hijo también recibieron una cuota de su ácido humor.