Por momentos, la política argentina parece escrita por Diego Capusotto y dirigida por Damián Szifron. Porque solo en esta tierra mágica donde la inflación se mide por semanas y los presidentes dicen que son "leones", puede pasar que Luis Majul, periodista y gladiador mediático del oficialismo libertario, termine en el ojo de la tormenta por un examen psicológico. Sí, para renovar el registro de conducir.
Resulta que el periodista estrella -o estrellado- de La Nación+ habría fallado en el examen psicológico para renovar su registro de conducir. Lo atendió una profesional de primer nivel, pero él se negó a firmar el resultado. Pidió hablar con su abogado y denunció que "unos dibujitos" no podían frenar su derecho a manejar. El dato lo largó Nancy Pazos al final de un Duro de Domar cargado de noticias pesadas: muerte del Papa Francisco, economía, Milei en su versión más desencajada.
Y cuando parecía que no quedaba tiempo para más, boom, la bomba inesperada: "Un periodista fue a renovar el registro y no pasó el análisis psicológico. Se negó a firmar y pidió hablar con su abogado". No dio el nombre al principio, pero enseguida aclaró que hablaba de Luis Majul, que el miércoles 23 de abril se presentó tranquilamente en la sede del Automóvil Club Argentino en Villa Soldati. Lo que parecía un trámite exprés terminó en episodio tragicómico. El periodista, ex macrista full time y hoy fan del mileísmo, fue atendido -según Pazos- por una de las mejores psicólogas del centro. Y el resultado fue contundente: "No apto".
Hasta ahí, todo podría sonar a episodio privado. Pero Majul, según la fuente de Nancy, reaccionó como si le hubieran tocado la fibra más íntima: "No puede ser que por unos dibujitos me retengan el registro", habría dicho, indignado, como si estuviera denunciando un golpe institucional. Acto seguido, pidió hablar con su abogado y se negó a firmar. Al día siguiente, fiel a su estilo de periodista influyente con contactos, fue a otra sede del ACA, esta vez en la Avenida Roca. Milagrosamente -cosas de Argentina-, el trámite fue dado de baja y comenzó de cero. ¿Resultado final? Licencia renovada y Majul otra vez al volante. ¿Habrán cambiado los dibujitos?
Pazos, en modo filosa, cerró su segmento con una pregunta que dejó retumbando en la pantalla de C5N: "¿Todo esto es cierto, Luis Majul? Te pregunto a vos." Mientras tanto, en redes sociales, los usuarios hicieron lo suyo. Memes con autos estampados contra micrófonos, dibujos de test de Rorschach con la cara de Javier Milei, y hasta algún que otro gráfico de "Nace una estrella (del caos)". En definitiva, la anécdota podría parecer menor si no resumiera tan bien el espíritu de época: un periodista que defiende con uñas y dientes un modelo de país sin psicólogos ni Estado, pero que, cuando los test se le vuelven en contra, llama a su abogado para que el sistema le dé una segunda oportunidad. La doble vara, el absurdo, y un registro de conducir que dice más que muchas editoriales.