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Matías Alé lloró, recordó su enfermedad y el apoyo de su mamá: "Iba en Ferrari sin mirar a los costados"

El cómico rememoró el brote psicótico con delirio místico que sufrió en en el 2015. 

04 Mayo de 2022 14:44
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La vida de Matías Alé hoy es distinta. Después de divorciarse de María del Mar Cuello Molar y de superar una internación de 42 días por su brote psicótico, el actor contó cómo se encuentra actualmente, tras haberla pasado muy mal años atrás. Resulta que en tan sólo seis meses, hace casi seis años, Alé se peleó con Sabrina Ravelli, se casó con María del Mar, estuvo internado por un brote psicótico y se divorció.

Un cóctel explosivo para el actor que se alejó de los medios durante 2016 para recuperarse del ataque que sufrió a principios de noviembre de 2015. Alé se casó por Civil con María del Mar el 1° de octubre de 2015. Un mes después, precisamente el 3 de noviembre, sufrió el brote psicótico con delirio místico que lo mantuvo internado por 42 días en la clínica psiquiátrica Avril.

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Alé siempre fue uno de los hombres más deseados y su fama de "piratón" no impidió que las mujeres se mueran por él. Pero en 2015 empezó a pasarla realmente mal, luego de casarse con María del Mar. "Matías cambió cuando anunciamos el casamiento. En su delirio decía que estaba embarazada y que yo no lo sabía. Cuando dijo que estaba embarazada él ya estaba mal", había contado su ex mujer.

Tras la internación, en enero de 2016 Matías y María se separaron. Con aquel recuerdo todavía a flor de piel, el actor reapareció en Mañanísima, donde reemplazó a Carmen Barbieri, quien estuvo cuidando a Fede Bal tras el fuerte accidente que sufrió en Brasil, y no pudo contener las lágrimas al recibir un mensaje sorpresa de su madre Elena. "Se hizo cargo muy joven de nosotros. Mi padre falleció a sus 44 años", contó Alé, sobre la importancia de su madre.

Además, recordó el apoyo que recibió de ella cuando sufrió los dos brotes psicóticos que cambiaron su vida. "Mi mamá me acariciaba la frente y me decía 'tranquilo' hasta que yo me dormía. Sin ella, no hubiera sido posible estar bien. La vida nos dio tiempo para poder devolverle, de alguna manera, lo que ella hizo por mí. Mas allá de que tuvimos un distanciamiento y una diferencia, uno piensa después con el paso del tiempo, por qué llegar a eso", sostuvo, envuelto en un mar de lágrimas.

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Con la emoción a flor de piel, le agradeció a su mamá el apoyo incondicional que le brindó durante todos estos años y agregó: "Yo la amo, ella lo sabe. Es la persona más importante de mi vida, con mi hermano. Y mis amigos. Que no se fueron. Cuando yo estaba internado, los días de visita eran los miércoles y los domingos. Ella me venía a ver, y teníamos una hora y media de visita, pero cuando se iba, la clínica cerraba las puertas".

Según contó de sus días en la clínica psiquiátrica Avril, lo "único que quería era que llegue de nuevo el miércoles”. "Ella no se iba, se quedaba en la puerta de la clínica, en el auto. Me compraba cosas ricas para la trasnoche mía. Sabés que me compraba postrecitos y me los dejaba en la recepción. Por la medicación que yo tomaba, tenía la necesidad de comer cosas dulces y a la noche, el médico que nos cuidaba, me daba el postrecito que me traía mi vieja", recordó.

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Finalmente entre lágrimas, Alé no dudó y mirando fijamente a la cámara, le dedicó un emotivo mensaje a su mamá: "Sé que la hice sufrir muchísimo. Sé el dolor que tuvo y por eso le pedí perdón. Te amo con todo mi corazón. Gracias y perdón si algo no salió como vos querías. Ella si me ve bien, está feliz. Tiene tres frases que siempre me dice: 'Feliz de verte feliz', 'disfrutá tu presente inmejorable' y 'vos pudiste'".

Durante los últimos minutos del programa, Alé recordó el cambio que significó en su vida sus peores momentos de inestabilidad mental. "Antes iba en una Ferrari yo y no miraba a los costados. Hoy voy en un Fiat Palio, tranquilo, observando todo el paisaje. Hoy prefiero tomar un mate con ustedes, tomar un café con mi vieja, salir a comer con amigos. Disfrutar una linda canción. Estar conectado con Dios. Somos muy creyentes en casa", concluyó.