25 Agosto de 2021 13:38
El príncipe Harry y Meghan Markle decidieron poner en alquiler su mansión en Montecito, Estados Unidos. Por fuera de las comodidades que tiene, y que contaremos en detalle, hay algunas exigencias para los futuros inquilinos. Una de ellas, que suele ser tradicional en las personas que ponen sus viviendas en alquiler, es la negativa a que haya mascotas en la casa.
Asimismo, prohíben que se consuma alcohol dentro de la propiedad y no pueden ingresar más de 15 personas. Con todo esto, el lector seguramente se preguntará qué tipo de alquiler es, si se trata de una excentricidad o capricho de la pareja real, o simplemente perdieron la cordura.
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Pero no. Meghan y Harry no quieren alquilar su casa para que otra persona pueda vivir, sino que su idea es que sea utilizada como un set de filmaciones, motivo por el cual publicaron el anuncio en el sitio giggster.com, que se especializa en poner a disposiciones locaciones para producciones audiovisuales.
Ofrecida como un lugar exclusivo, la mansión de los duques de Sussex tiene un precio de USD 700 por hora, con un acuerdo mínimo de diez horas. Es decir que cualquier persona o productora interesada en grabar algún tipo de material tienen que saber que deberá desembolsar al menos USD 7.000.
Pero ojo, conscientes de que se pueden venir muchas parodias sexuales, comunes en el cine XXX norteamericano, la pareja puso otra condición: no se pueden filmar escenas eróticas. Así que nada de alcohol y nada de sexo. En definitiva, sin diversión.
La casa, publicitada como "castillo”, tiene nueve habitaciones, 16 baños, un spa, una gran casa de huéspedes, una biblioteca, una sala de juegos, un cine y un gimnasio. En el exterior cuenta con una cancha de tenis, pileta y un rosedal. Cada rincón de la casa parece un perfecto encuadre para producciones de fotos o filmar series y películas.
La vivienda que Markle y el príncipe adquirieron en 2020 está ubicada sobre una calle sin salida en un vecindario conocido por su máxima privacidad. La construcción está distribuida en dos plantas y un sótano, y ocupa un terreno de 1600 metros cuadrados. Además de la piscina, el exterior -desde donde se puede contemplar el mar y las montañas- cuenta con varios jardines, patios, un estanque y un parque de juegos infantiles.