09 Julio de 2018 11:20
A fines de 2016, Luisana Lopilato y Michael Bublé recibieron la peor de las noticias: su pequeño hijo, Noah, tenía cáncer de hígado y estaba muy grave. La tormenta pasó y salió el sol para la familia, aunque todavía aquellos momentos dolorosos permanecen en el recuerdo de los protagonistas. Tal es así que el cantante lo definió como el peor momento de su vida.
Felices los cuatro. El presente de la familia
El año pasado, el pequeño Noah superó con éxito todas las etapas de quimioterapia y la intervención por la cual le extirparon el tumor de su hígado, gracias a la ayuda de los médicos y el apoyo constante de sus seres queridos se recuperó. Y si bien todo es felicidad en la familia gracias a la notable mejoría de Noah, el marido de Luisana explicó que “estuvo en el infierno”.
En una entrevista con Herald Sun, Bublé sostuvo que a causa de la enfermedad de su primer hijo, pensó en dejar la música para siempre. "Realmente pensé que nunca volvería a la música. Mi niño es un superhéroe. Y sabes qué, el infierno parece ser un lugar realmente agradable para vacacionar en comparación con donde hemos estado”, detalló.
La familia más unida que nunca.
En esa línea, el cantante canadiense sostuvo que "La familia es lo que importa. La salud de mis hijos, la relación con mi familia, mi esposa, mi fe, es la prioridad principal de mi vida. Vivo con una perspectiva que no tenía antes y me permite no tener miedo", agregó.
Y siguió: "La perspectiva me ha permitido reavivar mi amor por la música. Cuando atravesé el cáncer de Noah desde el primer momento hubo un chasquido. Recuerdo estar sentado en la habitación del hospital pensando: ´¿Estaba preocupado por algo de eso?´”.
Bublé y Lopilato esperan su tercer hijo juntos.
Según explicó, tras el diagnóstico de su hijo, “todo se volvió claro” en un segundo. “Esa claridad me dio la oportunidad de encontrar el amor por la música otra vez. Voy a volver a un mundo que necesita amor, romance y risa más de lo que lo ha hecho en mucho tiempo. Voy a ser un nexo para eso", sentenció el cuatro veces ganador del Grammy.