09 Marzo de 2017 14:50
Mirtha Legrand declaró hoy como testigo en el juicio que entabló contra su ex empleada doméstica, Lina Rosa Díaz, por el robo de joyas y dinero de su departamento, en 2010.
"Declaré todo bien, apelé a mi memoria porque esto pasó hace siete años y algunos detalles no los recuerdo precisamente", sostuvo la diva. "Espero que todo esto se esclarezca y que se sepa quienes fueron que los que se metieron en mi casa y robaron".
En un primer momento, después del robo, Mirtha dijo que el hecho había sido "político". Al ser consultada por sus dichos, se retractó e indicó que ya no sostiene eso, y que tenía gente a su alrededor que le llenaba la cabeza y le hicieron creer que la SIDE podría haberla robado.
El 5 de diciembre de 2010, cuando Mirtha se encontraba en Entre Ríos, unos ladrones entraron en su departamento, ubicado en la Avenida Libertador, y se llevaron US$ 1 millón en efectivo y joyas. La particularidad es que hicieron el ingreso usando llave.
"Me dejaron sin nada. Se llevaron absolutamente todo, hasta mi anillo de casamiento. Estoy muy alterada y muy asustada", había contado la conductora en aquella oportunidad. Por ello, la principal sospechosa fue Lina, quien llevaba 22 años trabajando como empleada doméstica.
Lina Díaz también declaró en la causa por el robo.
Díaz está procesada junto a su pareja, Jorge Antonio Petrak, y al hijo de éste, Orlando Aníbal Jiménez, por el supuesto delito de "robo agravado por su comisión con arma de fuego". Su ex mucama acusó de complicidad a la otra empleada Elvira y a Marcelo, acusación que le "disgustó muchísimo".
El robo
El 5 de diciembre de 2010, a las 2 de la madrugada, "tres sujetos no individualizados redujeron al empleado de seguridad del inmueble de la Avenida Libertador 2802, donde vive Mirtha Legrand. Tras exhibirle un arma de fuego, le cubrieron el rostro con su camisa y le ataron las manos con su corbata. Luego, por el ascensor de servicio, obligando al vigilador a ir con ellos, arribaron al 4° piso del edificio e ingresaron al departamento utilizando las llaves del lugar.
Mirtha y su llegada a Tribunales.
Sin prender las luces, valiéndose de linternas, se dirigieron directamente al dormitorio principal y sustrajeron una caja fuerte que se hallaba en el interior del placard. Se apoderaron también de objetos personales tales como anteojos de sol, polveras, pañuelos de seda con las iniciales 'ML' y papeles varios, según se detalló en el informe judicial.
Mirtha estaba en ese momento en "un evento en la provincia de Entre Ríos. Según la investigación que llevó adelante el juez Rodolfo Cresseri, la caja fuerte contenía US$ 20.000, $ 500.000 y joyas por un valor cercano a US$ 1 millón.