25 Septiembre de 2017 12:48
La semana pasada, Sofía Gala estuvo en el centro de la polémica después de haber opinado públicamente sobre la prostitución, y ahora, Moria Casán, además de defender a su hija de las críticas, confesó que en su adolescencia cobró a cambio de sexo.
Moria Casán habló de las declaraciones de su hija sobre la prostitución.
"Mi hija vino a promocionar su película, pero a ella casi le tenés que rogar para que haga publicidad, le gustaría no hacer nada, porque tiene cierta reticencia por la cámara y yo le digo 'amor tenés que vender tus cosas', porque no es que te estás exponiendo vos, sino que estás exponiendo tus trabajos", dijo en diálogo con Jorge Rial en Intrusos.
"Me esperaba esa repercusión porque hay mucha ignorancia, eligió hablar de las mozas como podría haber hablado de cualquier cosa", sostuvo y luego agregó que su hija es muy honesta y que sin problemas, suele decir lo que piensa.
Del mismo modo, la ex vedette aclaró que a la gente no se le puede mentir ni hacerle perder su tiempo y que lo mejor es siempre decir la verdad ante la cámara. "Ella contó una elección propia y se le dio mucha importancia porque querían que ella fuera a pedir disculpas y ella no lo iba a hacer", aclaró.
"Ella no hace apología de prostitución, y en su película Analis, se toma a la prostitución como hago natural, son como elecciones, es lo que elige mucha gente", explicó la diva, y rápidamente desde el programa le consultaron si alguna vez ella ejerció la prostitución.
"Yo creo que todas las mujeres son putas, y he sido prostituta, re contra gato. Me ofrecían dinero y yo aceptaba y me encantaba", declaró sin vueltas.
"No quiero remover cosas, pero yo sufrí un abuso de chica de un familiar muy cercano, y si bien eso lo desdramatizé, algo habrá quedado y un día estudiando geografía, salí a la calle y dije 'tengo que levantarme un tipo y me tiene que pagar' y fui. Lo que hice no importa, pero estuve con un hombre y me pagó", contó la diva del teatro.
En relación a esto, aseguró que le gustó tanto esa primera vez, que después empezó a tener como una especie de doble vida, donde en su casa era una persona y afuera otra.
"No sé si ejercí la prostitución, porque tampoco me puse en una esquina con una carterita, pero elegí dar mi cuerpo por una razón que todavía no la sé. Después obviamente elegí otra cosa, aunque el teatro de revista es como la prostitución, el actor pone el alma, el corazón", finalizó Casán.