Seis días atrás, la noticia de la internación de Hugo Arana por un accidente doméstico en una clínica del barrio porteño de Colegiales conmocionó al mundo del espectáculo. Al ser ingresado, los médicos confirmaron además que el reconocido actor de 77 años tenía Covid-19. Su muerte fue confirmada en horas de la mañana del domingo.
La noticia fue confirmada pasadas las ocho de la mañana por la cuenta oficial de Twitter de la Asociación Argentina de Actores. "Con gran pena, despedimos al compañero Hugo Arana. En su prestigiosa trayectoria en cine, teatro y TV ha sido respetado y querido, tanto por sus pares, como por su público. Acompañamos en este triste momento a su hijo Juan, a sus familiares y seres queridos".
Oriundo del pueblo bonaerense Juan José Pasó, se mudó a los once años con su familia a Lanús. "Para mí, fue pisar asfalto por primera vez. Cuando abrí la canilla y salió agua lo viví como un milagro", recordó en una entrevista. Sus primeros trabajos fueron como pintor, colocador de alfombras y hasta electricista. El bichito de la actuación picó recién a los 22 años, cuando vio un cartel en una ferretería.
"Un día fui al Centro a comprar tornillos y vi un cartel que decía: 'Hágase actor, centro experimental cinematográfico'. Y me quedé como helado. Nunca había visto teatro, aunque me gustaba mucho el cine. Estaba desesperado por hacer algo en mi vida".
"El santo de la espada" fue la película dirigida por Leopoldo Torre Nilsson en la que Arana tuvo su primer papel en 1970. Dos años después, saltó a la fama por una popular publicidad de un vino y, desde entonces, se convirtió en una de las figuras más queridas y respetadas del espectáculo.