06 Febrero de 2017 08:31
Desconsuelo. Zaira y Wanda Nara se despidieron esta mañana desde las redes sociales de su abuela materna, Rosa Colosimo. La mujer tenía 87 años y sufría desde hace años Alzheimer, enfermedad que la llevó a acusar en la televisión a su nieta mayor de “peter...”. El descalabro que causó en su salud la muerte de su marido, Chacho, y la denuncia que sufrió su hijo menor por acoso de menores.
Las modelos le dedicaron emotivos mensajes de despedida a Rosa en las redes.
“Te vas con el amor de tu vida. Él te espera y te abraza fuerte por todos nosotros. Que en paz descanses, abuela. Te recordaremos siempre con una sonrisa por tu humor y con una ternura por tu bondad, amor y gran corazón”, destacó Wanda y adjuntó un collage de fotos junto a Rosa, quien tras la muerte de su marido, Carlos, pasaba mucho tiempo en Italia junto a los Icardi en su lujoso penthouse de Milán (para conocerlo por dentro, hacé click acá).
Nora, Rosa y Zaira: tres generaciones, en una misma foto.
Zaira también manifestó su dolor, primero con una foto en la que se la puede ver junto a su abuela y a su hermana. “Acaba de partir la persona más dulce, buena y generosa que conocí en mi vida. Mi abuela Rosita, me enseñaste todo y sólo puedo vivir este momento con felicidad porque sé que lo que más anhelabas era volver a encontrarte con el gran amor de tu vida, el abuelo Cacho”, detalló.
Wanda, Zaira y sus abuelos "Cacho" y "Rosita".
“Daría lo que no tengo por ver ese beso de reencuentro. Me enseñaron el amor incondicional y sentí al lado tuyo lo que extrañabas cada día desde que se fue. Te amo, abuela. Fui la nieta más feliz. Gracias por cada enseñanza, mimo y amor que me dieron. Te recordaré a cada paso. Te extrañamos”, sumó la morocha.
"Mali sabrá cada una de sus historias", le prometió su nieta menor.
Minutos después, la menor del mediático clan publicó otra foto, pero de cuando era pequeña. “Nuestro mejor plan. Nuestros abuelos. Mali (por Malaika, su hija que en dos meses cumple un año) sabrá cada una de sus historias. Se me rompió el corazón. Pero sólo me consuela saber que están juntos otra vez”, lamentó.
Nora, de paseo con su madre: una de las fotos con las que la recordó en Twitter.
Nora, la madre de las modelos e hija de Rosa, también manifestó su dolor y compartió decenas de fotos familiares, en las que se la puede ver a la anciana en los momentos más importantes en la vida de sus hijas.
La salud de Rosa y la polémica por sus dichos
Wanda saltó a la fama en 2006, año en el que luego de inventar un romance con Diego Maradona, sorprendió en la tapa de Paparazzi por su sugerente y poco creíble revelación. “Soy virgen”, sostenía la voluptuosa rubia de por entonces 19 años. Pocos recuerdan su primera visita al ciclo Intrusos, la misma en la que Jorge Rial debió ordenarle que se cambiara debido a que había llegado con un jean roto y las zapatillas sucias.
Hasta entonces, ni siquiera su hoy famosa hermana Zaira era de interés de los medios. Pero, poco a poco, los Nara se hicieron de un lugar en la fauna mediática nacional, que hasta acobijó y acompañó la carrera de cantante a “Cari Nara”, la ex amante de Andrés, el padre de las modelos.
La tapa que reveló que Rosa sufría una enfermedad.
Seis años después de aquella tapa de Paparazzi, la prensa dio con Carlos y Rosa, a quienes bautizó como “los abuelos pobres de las Nara”. Por entonces, el matrimonio pasaba sus días en su casa de Boulogne (en la que vivió 50 años), manejaba un Renault 11 modelo '93 y mantenía un nivel de vida muy alejado al de sus nietas.
Carlos murió en 2012, el mismo día en el que había llegado a Italia para conocer a su tercer nieto.
Ese fue el primer momento en el que se reveló la enfermedad crónica de Rosa, algo que alteró por completo a “Cacho”. “Pusieron que mi señora está convaleciente de una enfermedad importante. Lo saben, pero no les importó, sabiendo que el disgusto es lo peor que hay para enfermedades de esta naturaleza. No tienen alma, no deben tener ni madre, ni abuela”, se quejó desde la puerta de su modesta casa.
Wanda, por entonces casada con Maxi López, los fue a buscar al aeropuerto.
Los años pasaron y, finalmente, Rosa y Cacho viajaron el 27 de septiembre de 2012 a Italia para conocer a su tercer nieto, Benedicto, de por entonces siete meses. Wanda los fue a buscar al aeropuerto y los recibió en el departamento que compartía junto a su primer marido, Maxi López. Ese mismo día, “Cacho” murió.
Rosa aprobó de inmediato el segundo matrimonio de Wanda con Icardi.
“Me duele el alma. Un ángel se fue al cielo. Hace meses planeamos este viaje con mis abuelos. Estaban felices de poder conocer a Benedicto. Los trajimos del aeropuerto con Maxi, tomé mate con ellos, almorzamos. Estaban felices, sobre todo mi abuelo”, detalló ese mismo día y desde Twitter la botinera.
Pese a que su nieta le había advertido que el viaje podía ser “cansador”, Carlos insistió. “Era especial para él venir a Italia. Me dijo que era el día más feliz de su vida, que no podía pedir más. Lo fui a acostar, le destapé la cama, le dije lo feliz que estaba de tenerlos en mi casa y lo tapé. Volví al living con mi abuela (Rosa)”, sumó.
Tras la muerte de "Cacho", Rosa comenzó a viajar con frecuencia a Italia.
Con el correr de las horas, Rosa le pidió a su nieta mayor que despertara a su abuelo de la larga siesta. “Fui sola. Nunca se despertó. Mi abuelo se fue feliz. Me siento en paz. Tengo bronca, angustia y siento que lo quería aún un poco más. Tomé el mate más feliz de mi vida y les preparé una pasta con pesto: su plato favorito. Dios eligió que se fuera acá y Dios manda. Le pido que lo reciba y que me ayude a cuidar a mi abuela, que se quedó sin su compañero después de 56 años de matrimonio”, lamentó.
Wanda junto a su abuela en Italia.
Desde entonces, Rosa quedó al cuidado de Nora. Ambas viajaron con frecuencia a Italia para ayudar a Wanda con la crianza de sus hoy ya cinco hijos. Pero un incidente mediático volvió a ponerla en julio del año pasado delante de las cámaras.
La detención de su hijo menor, Carlos, por presunto abuso de menores la desestabilizó.
El avance de su enfermedad hizo que diera una entrevista en la que acusó a su hija de haber abandonado a su hermano Carlos (detenido tras ser acusado de abusar sexualmente de tres menores) y le recordó a su nieta mayor el famoso video en el que se la podía ver practicándole sexo oral a un hombre.
“Lo amo a mi hijo, no veo la hora de que salga. Le pido todo a Dios y me lo cumple, pero esto no sé por qué no. Vivo sola, él está sólo, podríamos estar muy bien. ¿Pero qué hay en contra? La gran y grave desgracia de él es ser el tío de Wanda. Se creían que siendo el tío le iban a sacar una fortuna, pero, perdonen la mala palabra, (Wanda) no le dio un sorete. ¿Saben lo que le dijeron? Que por ellos puede morirse ahí adentro. Nadie quiere saber nada de él, quieren que muera en la cárcel”, denunció.
Zaira junto a su tío, hoy detenido por presunto abuso de menores.
Pero el descargo de la anciana no quedó ahí. “Si no lo hacen por él, que lo hagan por mí. Que piensen en mami, que necesita tener una persona. ¿Ustedes piensan que Wanda estuvo en Buenos Aires y vino a darle un beso a su abuela? No vino. No me importa que salga en televisión, total, lo sabe todo el mundo que vino. Mi hija fue la alcahueta. Le dije (a Nora) qué puede hablar Wanda de mi hijo preso, si ella lo que hizo es el pet... y se hizo famosa por eso”.
Rosa, Wanda, Zaira y Nora, en el día del casamiento por civil de Wanda con Icardi.
“A Wanda no le interesa nada, ella es así. No es Zaira. Zaira es otro personaje. Es una finura, es una delicadeza. La Wanda es muy buena, pero es una guasa”, aportó.
Desde Italia, Wanda no tardó en responder y explicar el incidente. “Mi abuela es una señora enferma de Alzheimer. Muchas veces le hemos puesto empleadas, que ella misma echa. Es muy difícil manejarse con esta enfermedad. Ella no se quiere mudar, no quiere salir de su casa. Está empecinada con el tema de mi tío. Yo tomé la postura de que si tenía que ayudar a alguien, era a mi prima y a la ex mujer de Carlos. Pago adelantado la escuela de mi prima para que pueda seguir yendo”, se justificó.
