Ningún diseñador puede darle forma final a sus creaciones sin musas que ofrezcan tanto inspiración inicial como espíritu final a las prendas. Así, Karl Lagerfeld, cerebro detrás de la casa Chanel fallecido a los 85 años, tuvo a varias mujeres como compañeras de su viaje artístico. 

Raíces argentinas

Hija de la argentina Cecilia Sánchez Cirez y del francés André de Seignard, Inés de la Fressange fue una de las musas clave del diseñador durante los '80, a través de un contrato de seis años para convertirse en el rostro de la casa Chanel. 

Lagerfeld ajustando uno de sus diseños con De la Fressange.

Sin embargo, su relación fue tormentosa: cuando la modelo decidió posar para un busto oficial de Marianne, imagen representativa de la República Francesa, Lagerfeld la criticó duramente. "Le deseo toda la suerte del mundo hasta el punto de no tener que verla nunca más, ni oír hablar de ella", declaró ofendido, porque a su juicio Marianne simbolizaba lo "aburrido, burgués y provinciano".

Sin embargo, años después, se reconciliaron y De la Fressange apareció sobre la pasarela en la presentación de la colección primavera-verano 2011 de Chanel. 

Esa rubia debilidad

La de Claudia Schiffer es sin duda la imagen más famosa asociada a Lagerfeld. "Ofrece 10.000 expresiones distintas y tiene una auténtica historia de amor con la cámara", supo elogiarla el diseñador.

Tiene una auténtica historia de amor con la cámara"

La sociedad con Schiffer fue una de las más fructíferas de Lagerfeld.

Y la modelo devolvió gentilezas varias veces agradeciéndole el haberle dado una de las oportunidades más grandes de su carrera, la que la convirtió de una joven modelo casi anónima a una superestrella.

"La musa de Chanel había sido hasta ese momento Inés de la Fressange y de repente llegué yo, lo opuesto: ella era más morocha, menos curvilínea. Antes no había modelos rubias en los desfiles de Chanel, así que asumo que lo que quiso fue sorprender, y lo consiguió. La reacción de la prensa fue increíble y yo era tan joven que estaba totalmente abrumada", declaró Schiffer en una entrevista con Vogue.

Rebelde y rockera

"Es la chica libre de nuestra época", definió Lagerfeld a Kate Moss, la modelo inglesa conocida por sus noches de descontrol y cuya rebeldía encandiló al diseñador. 

Moss alistándose para un desfile frente a la mirada de Lagerfeld. 

Para Karl, Moss encarnaba al "tipo ideal" de mujer con el que "se identifica más de una generación de mujeres jóvenes". Además, aseguró que tiene "un aura única". 

Estilo inglés

Para el corto Once Upon a Time, que Lagerfeld dirigió como homenaje a Coco Chanel, fundadora de la casa de moda para la que diseñaba, eligió a Keira Knightley para encarnarla.

"Coco era una mujer enamorada del amor", señaló el diseñador justificando su decisión de elegir a la actriz inglesa para que el rol protagónico en su filme.

"Es genial. Trabajo bien con ella. Es muy fácil", agregó sobre Knightley, que también se convirtió en protagonista de las publicidades de N° 5, el icónico perfume de la firma. 

Un toque del Hollywood joven

Kristen Stewart, quien saltó a la fama gracias a la saga Crepúsculo, fue otra de las elegidas por el diseñador para protagonizar uno de sus cortos, Once and Forever.

"Creo que es una de las grandes actrices de su generación. Te da la emoción adecuada y la intensidad correcta inmediatamente", elogió Lagerfeld. "Tiene talento. Parece difícil pero es la mejor persona del mundo".

Además de la película, Stewart -al igual que Knightley- ha llevado varios diseños de Chanel en la alfombra roja y protagonizó campañas gráficas de la casa de moda.