Pasaron dos semanas del día en que Flor Vigna, en medio de la tormenta, anunció su separación de Luciano Castro. La bailarina, que ya venía teniendo golpes y situaciones desafortunadas dentro de la farándula, confirmó que se encuentra nuevamente soltera pero sin dar motivos ni detalles de las razones que la llevaron a tomar esa decisión.
Con pocas palabras y poniéndole el pecho a la situación, escribió mediante su cuenta oficial de Instagram: "Hace un tiempo ya no estamos juntos con Lu. Nos separamos con mucho amor y respeto. Lo mantuvimos en secreto para cuidarnos. Aprendí muchas cosas a su lado, me enseñó un amor sano y libre que hoy nos cuesta pero tenemos que despedir".
Los días pasaron y poco se supo sobre cuál fue el puntapié que los llevó a ambos a tomar esa decisión. Es que, en el medio de aquello, también habían blanqueado su relación Flor Jazmín Peña y Nico Occhiato, por lo que Vigna había demostrado una clase de "celos" y "molestia" de ese romance y hasta admitió que debe dejar de "mezclar su pasado con el presente".
No obstante, con lo poco que dejaron saber, se dio a conocer que una de las razones de la separación no fueron los celos por "Occhiamín", sino algo mucho más profundo: la relación que tenía la bailarina con los hijos de Castro. Fue la periodista Cora Debarbieri quien reveló que Vigna nunca pudo incluirse por un tema del actor y de Sabrina Rojas en la familia que tenían y eso, a la larga o a la corta comenzó a ser cada vez más pesado.
No obstante, en las últimas horas la periodista Paula Varela amplió un poco más en detalle la información, extendiendo que todos aquellos problemas en los que Vigna no podía integrarse a la familia e incluso uno de los principales motivos de la separación, tenían un nombre y un apellido: Sabrina Rojas, la ex y madre de los hijos de Castro.
Varela aseguró desde el primer momento en que comentó que estaba hablando con la ex participante de Combate, que la vio "llorisqueando" y que se dio cuenta que la tristeza por la separación aún no cesa. Además, detalló: "Ella fue muy clara. Me dijo 'es la primera vez que estoy en una relación donde mi pareja tiene una ex mujer e hijos. Pensé que podía manejarlo, pero no'".
Y en esa misma línea, la panelista agregó cuáles eran los principales conflictos entre las dos mujeres y los hijos de Castro de por medio, que hacían aún más pesada la cuestión. "Flor Vigna admitió llorando que siempre que intentó intervenir en la relación entre Sabrina y Luciano, para mediar o armonizar, salió lastimada. No lo está manejando de la mejor manera".
Sin embargo, Varela insistió en un foco en común que es que cuando se dio a conocer la pareja de Castro y Vigna y a la par sucedió la de Rojas con el "Tucu" López, se arriesgaron a tener un vínculo de separados con la mejor de las ondas y apostaron a llevarlo a la amistad teniendo salidas de a cuatro y encuentro de parejas.
De igual manera, eso mismo duró tan sólo un momento porque rápidamente todo se vio desdibujado y fue Vigna quien aclaró el porqué de esa distancia. "Lo intentamos en un momento pero no funcionó. Creo que Lucho todavía tiene que resolver muchas cosas con Sabrina y hasta que eso no suceda, no vamos a poder estar juntos".
Por último, reveló: "Me dijo textualmente 'yo amo a Lucho. Sigo enamorada de él'. Por eso está tan triste. Ella lo ama pero entiende que no pueden estar juntos mientras no se resuelva la historia con Sabrina. Ella es muy amorosa".