por Mauro Fulco
03 Septiembre de 2015 17:06
Una empresaria de 48 años -“G” para esta nota-, decidió que era momento de pasar por el quirófano. Eligió al doctor Aníbal Lotocki, mediático y farandulero, para practicarse una liposucción en el abdomen.
La grasa que le extraerían pasaría luego a los glúteos y quedaría firme con hilos tensores. La intervención se realizó en la clínica Full Esthetic, del barrio de Belgrano.
El mediático cirujano Aníbal Lotocki, otra vez bajo sospecha de haber inyectado metacrilato a una paciente.
Pero algo salió mal. Al parecer, el cirujano de los famosos le habría inyectado metacrilato o alguna sustancia tóxica, que derivó en una internación en el Sanatorio Los Arcos. G., está en terapia intensiva. Y puede morir.
G. es empresaria, tiene 48 años y se operó con Lotocki. Está en terapia intensiva y corre riesgo de muerte.
Los nombres que transitan la clínica y se entregan a las manos de Lotocki son famosos. Moria Casán lleva la bandera, y el listado de celebridades que lo consultan es extenso y quedó retratado en el twitter del cirujano. Oriana Junco, Fernanda Vives, Mariela Anchipi (mujer de Dady Brieva) y Mónica Farro.
En su cuenta se define como “Medico cirujano~especialista en cirugia estetica~cosmetica~ formen en bioplastia~ Director médico de@FullEsthetic”.
Pero no es la primera denuncia que sufre el mediático cirujano. La más recordada, sin dudas, es la de Silvina Luna, quien en 2014 estuvo internada durante 8 días por las consecuencias de un tratamiento médico que se hizo con Lotocki.
La modelo y vedette lo acusó de haberle inyectado metacrilato, y que eso le provocó serios problemas renales. Le entabló un juicio millonario y la Justicia allanó la clínica. Verónica Ojeda también se operó con Lotocki. Y también la pasó mal.
El diario Clarín señala que en 2007, Lotocki fue denunciado por mala praxis por la muerte de una paciente. En esa oportunidad, el médico dijo: "Fue una paciente que yo había operado y que se murió después en un sanatorio por otra cosa, no por la cirugía. La Justicia después investigó y no encontró ningún indicio de mala praxis médico".
La misma nota sospecha que el cirujano no tendría el título habilitante de especialista en cirugía plástica que otorga el Ministerio de Salud Pública de la Nación. G. está internada en Los Arcos al borde de la muerte. Y Lotocki -otra vez- vuelve a estar acusado.
