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Paloma Fort exige 300 millones de dólares y exhumarían el cuerpo de Ricardo

Impugnó la paternidad de Felipe, el patriarca del clan. Cree que su verdadero padre es Carlos, el padre de Ricardo. El juicio por filiación que podría costarle millones a los chocolateros.

por Manuela Fernandez Mendy

16 Mayo de 2017 09:55
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“Yo no pedí tener esta vida. Vos no viviste nada de lo que yo viví. No falleció tu papá, tenés mamá y seguro tu familia no se está peleando por la plata”. Con esas las palabras Felipe Fort, de sólo 13 años, se defendió de un ataque “anónimo” en las redes sociales, tras compartir una foto en la que se lo podía ver con una remera de su difunto padre, Ricardo.

El juicio por filiación de Paloma Fort podría costarle millones al clan chocolatero.

Pero la adulta y educada defensa de Felipe desató un nuevo escándalo que caló hondo en la interna del excéntrico y millonario clan Fort. La familia acusó de inmediato a Gustavo Martínez, ex pareja de Ricardo y tutor de sus mellizos, de reclamar dinero a su nombre. El “elegido” de Fort salió a defenderse con todo.

Eduardo (hermano de Ricardo) y Marta (madre del mediático).

“Yo no tengo un peso de la familia Fort. Había una suma de dinero que siempre guardaban y repartían entre todos los herederos, incluido Ricardo. Pero desde que falleció, ese dinero desapareció. Pasaron dos o tres años y les dije: '¿Están pasando esa suma a la cuenta de los chicos?'. No me respondieron nada. Le dije que ese dinero lo pusieran en una cuenta, pero a nombre de los hijos”, denunció Gustavo.

La familia de Ricardo acusó a su ex y tutor de sus hijos, Gustavo, de pedir plata.

La batalla por los millonarios dividendos que factura la fábrica de chocolates no es el único drama judicial que enfrentan los Fort. Paloma, inscripta en el Registro Civil de la calle Uruguay como hija de Felipe (fundador de la empresa) y la astróloga Aschira, mantiene desde hace al menos cinco años un litigio por filiación.

Aschira, la madre de Paloma, también le dijo que su padre no era Felipe Fort.

Consultada sobre el reciente cruce entre Eduardo (uno de los dos hermanos de Ricardo) y Gustavo, Paloma prefirió llamarse a silencio. “Por respeto a los niños de Ricardo prefiero no hablar”, esquivó en diálogo con BigBang, aunque aclaró: “Mi juicio por filiación sigue adelante, yo nunca vi un peso de la herencia”.

El millonario reclamo de Paloma y la posible exhumación del cuerpo de Ricardo

Paloma, quien divide sus meses entre Londres y Buenos Aires, sostiene que, en realidad, es hija de Carlos, padre de Ricardo. De comprobarse la filiación, debería retomarse la millonaria sucesión del padre del excéntrico chocolatero y Paloma accedería al mismo porcentaje del paquete accionario que sus posibles hermanos: Eduardo y Jorge y al de Ricardo, hoy administrado a favor de sus mellizos, Marta y Felipe.

Felipe Fort fundó en 1912 la fábrica de chocolates FelFort.

Las cifras son millonarias. Desde la muerte de Carlos, en 2007, cada uno de sus hijos habría cobrado un promedio de dos millones de dólares anuales en dividendos. Es decir que, de comprobarse la paternidad, Paloma debería recibir los 20 millones que le corresponderían como hija. “Eso es sólo lo que obtuvieron en calidad de ganancias de la fábrica. El mismo Ricardo reconoció que había recibido 250 millones de dólares cuando murió su padre, por lo que el reclamo podría superar los 300 millones”, precisó a BigBang el abogado de Paloma, Javier Moral.

 

Su reclamo no es nuevo. Paloma irrumpió en los medios en septiembre de 2011 cuando, frente a la creciente popularidad de Ricardo, la historia de la “hija oculta” de Felipe Fort hizo correr ríos de tinta en todos los medios nacionales. Pero el excéntrico clan siempre le dio la espalda.

La mujer de Felipe, Asunción, y sus hijos Carlos, Amelia, Marta y Felipe.

Paloma tenía sólo seis meses cuando murió Felipe, su presunto padre y abuelo de Ricardo. En su momento, Aschira heredó en nombre de su hija “algunos departamentos”, pero la mayoría fueron rematados. “Su madre recibió departamentos que estaban a punto de ser rematados porque tenían muchas deudas de expensas. Lo recibido fue prácticamente nada”, advirtió Moral.

La revelación que cambió la vida de Paloma

“Fueron unas declaraciones de Marta (madre de Ricardo) las que la hicieron dudar sobre su verdadera identidad”, reconoció el abogado de Paloma. “En una entrevista con Chiche Gelblung dijo que Paloma no era hija de Felipe, sino que su padre era otro miembro de la familia Fort, pero se negó a precisar quién”, agregó.

Ricardo murió en noviembre de 2013. Podrían exhumar sus restos.

Las dudas se instalaron de inmediato y Paloma decidió hablar con su media hermana materna, quien le confió: “Tu papá es Carlos, no Felipe”. La joven pasaba de ser la tía de Ricardo a ser su hermana y, por sobre todas las cosas, la cuarta heredera de una de las fortunas más grandes del país.

"Hicieron un informe que determinó que Felipe no pudo haber sido su padre

Decidida a saber la verdad, Paloma consultó a los mejores especialistas genéticos de Inglaterra para dar el primer paso. “Hicieron un informe que determinó que Felipe no pudo haber sido su padre, dado que se trataba de una persona que tenía 73 años al momento de concebirla. Los cálculos genéticos advirtieron que esa edad, hace cincuenta años, equivaldría a 104 años actuales”, confirmó el abogado.

“Lo que se dice en la familia es que Felipe la inscribió como hija propia para cubrir el papelón de su hijo

El embarazo de Aschira coincidió con el de Marta, quien esperaba a su tercer hijo: Ricardo. Felipe, por su parte, atravesaba graves problemas de salud. De hecho, murió seis meses después del nacimiento de Paloma. “Lo que se dice en la familia es que Felipe la inscribió como hija propia para cubrir el papelón de su hijo”.

 

Paloma sumó la confesión de Marta, la de su media hermana e incluso la de su propia madre, con quien mantuvo hasta el último día de su vida una mala relación. Todos los caminos conducían a Carlos y el primer paso para demostrar su filiación consistió en impugnar la paternidad de Felipe.

El doloroso entierro de Ricardo en el cementerio Memorial de Pilar.

“El juicio comenzó en 2012, un poquito antes de la muerte de Ricardo”, precisó el abogado. Fue la muerte del mediático, el 25 de noviembre de 2013, la que demoró los tiempos procesales. “Primero tuvo que abrirse la sucesión de Ricardo, que era complicada porque tenía dos hijos menores (tenían nueve al momento de la muerte de su padre) y se tuvo que tramitar la tutela dativa (de Gustavo)”, reconoció.

Una vez resuelta la sucesión del mediático, un juez entendió que el juicio iniciado podría tener una sentencia favorable, por lo que debía sumarse a la sucesión de Carlos. “Todo esto demoró muchísimo los tiempos”, advirtió el letrado, quien anticipó: “El paso que sigue es la extracción de muestras de ADN de Eduardo o Jorge para comprobar la biocompatibilidad. Es decir: probar si es o no hija de Carlos”.

"Si Jorge o Eduardo se niegan, se procederá a la exhumación del cuerpo de Ricardo

Pero, ¿qué sucede si los Fort se niegan al examen? “Los restos de Carlos fueron cremados y la intención de la familia era hacer lo mismo con el cuerpo de Ricardo. Por eso solicitamos una medida cautelar, que nos fue otorgada, para impedir la cremación hasta que se resuelva el juicio por filiación iniciado por Paloma. Si Jorge o Eduardo se niegan, se procederá a la exhumación del cuerpo de Ricardo”, anticipó. Los restos del mediático fueron enterrados en el cementerio Memorial de Pilar. Se encuentra en uno de los sectores más exclusivos: el que está detrás de la capilla.

Fue Marta quien aseguró que Paloma no era hija de Felipe, sino de otro Fort.

La traba actual impuesta por la defensa de los Fort ya fue sorteada. “Ellos hicieron un planteo técnico basándose en que Paloma no podía litigar en la Argentina porque no tenía domicilio en el país. Ella vive algún tiempo del año en Londres, pero el registro nacional ya demostró que tiene domicilio en Capital, por lo que no hay más impedimentos”, explicó Moral.

La causa permanece en el Juzgado Civil 75° a cargo de la jueza Virginia Simari. Será ella quien, en los próximos meses, deberá dar lugar al pedido de extracción de ADN y eventualmente aprobar la exhumación del cuerpo de Ricardo.

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