Marcelo Tinelli volvió a quedar en el ojo de la tormenta: tras la polémica que despertó casi un mes atrás, cuando horas antes de que el Gobierno decretara la cuarentena viajó con toda su familia a Esquel en un vuelo privado, ahora el conductor de televisión se hizo llevar una valija en un chárter, a pesar de que están prohibidos los vuelos.
La historia ocurrió el viernes pasado y volvió a generar polémica: el casero del campo de Tinelli en Esquel salió rumbo al aeropuerto y horas más tarde regresó con una valija que el conductor de El Trece hizo que le enviaran a la vivienda en la que pasa la cuarentena junto a su familia desde el 19 de marzo pasado. La polémica se desató porque, tal como establece el decreto presidencial, están prohibidos los vuelos no esenciales.
Según publicaron medios patagónicos, el vuelo habría arribado desde Buenos Aires y pertenecería a la empresa Baires Fly, que habría solicitado una autorización para realizar un vuelo de tipo “sanitario”, que sí se encuentran habilitados a pesar de la cuarentena. El avión aterrizó sin pasajeros y los pilotos sólo descargaron la valija, que minutos después se llevó el casero de Tinelli en la misma camioneta RAM color azul que había utilizado el conductor de TV para trasladarse desde el aeropuerto de Esquel hacia su campo, semanas atrás.
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Por el vuelo, la Justicia federal abrió una causa, luego de que las autoridades del aeropuerto Brigadier Parodi presentaran la denuncia por la violación de la cuarentena. La causa quedó en manos del juez federal de Esquel, Guido Otranto, el mismo que instruyó la causa por la desaparición forzada de Santiago Maldonado, entre agosto y octubre de 2017, y que luego fue apartado de la causa y reemplazado por Gustavo Lleral. El gran enigma, además, es qué había en el interior de la valija y cuáles fueron las razones que motivaron la urgencia.