Luego de su separación del empresario Matías Garfunkel, Victoria Vannucci cultivó el perfil bajo. Pero ahora, volvió a hacer olas con su regreso a Argentina para reunirse con la abogada Ana Rosenfeld.
Nueva vida
La abogada es quien lleva adelante el proceso de división de bienes entre la modelo y su ex marido, el cual debe repartir bienes localizados tanto en nuestro país como en Estados Unidos.Vannucci sorprendió con un look diferente: se cortó el pelo y se hizo algunos tatuajes visibles. Actualmente, vive en el estado norteamericano de California junto a sus dos hijos y se rumorea que habría comenzado un romance con un empresario cinematográfico de México.
Veganismo y meditación
"Vicky cambió su vida por completo. Ya no se mueve con chofer, ahora maneja y lleva una vida simple", supo relatarle Rosenfeld a la revista Caras. "Se levanta a primera hora de la mañana para llevar a sus hijos al colegio y no cree más en la vida que tuvo".La modelo además decidió cultivar el estilo de vida vegano y tiene una huerta orgánica propia para abastecerse. También comenzó a practicar yoga y meditación para combatir los ataques de pánico que sufrió en los meses previos a su separación de Garfunkel.
Otro de los motivos de la visita de Vannucci a Argentina es acordar con Rosenfeld la continuación de su juicio contra Twitter a causa de los ataques que sufrió cuando aparecieron fotos de ella y Garfunkel cazando y posando junto a animales muertos en África.
"Ligaba de rebote"
"Victoria fue atacada por estar casada con Garfunkel. Ella pidió una y mil veces perdón por esas fotos que eran antiguas", señaló Rosenfeld. "Gracias a la demanda que iniciamos, Twitter cambio las reglas en los contratos posteriores: ahora se puede denunciar las agresiones y bloquear las cuentas, entre otras cosas"."Ella la ligaba de rebote", subrayó la letrada. "Estaba muy expuesta y no tenía la culpa de lo que hacía el marido. Ella salió públicamente a defenderlo pero no tenia porque bancarse las agresiones e insultos. Hasta llegaron a desearle la muerte".