05 Septiembre de 2016 06:10
El escándalo se destapó ayer, después de que BigBang publicara en exclusiva las fotos y los chats que Amalia Granata encontró en el celular de su pareja, el empresario gastronómico Leonardo Squarzon (42).
Esas fueron las pruebas con las que la ex vedette de 35 años confirmó, estando de seis meses de embarazo, que el padre de su bebé le había sido infiel. La identidad de la tercera en discordia era un misterio, hasta ahora.
Pau es misionera, pero vive en Pilar.
Pese a la repercusión de la noticia, todas las partes se llamaron a silencio. Granata, incluso, recibió la indicación médica de hacer reposo por una semana para cuidar su embarazo, debido al estrés emocional que atraviesa.
Las pruebas que Amalia encontró en el celular de su pareja.
Sin embargo, fue la periodista Greta Rodríguez quien dio los primeros indicios que permitieron identificar a la señalada como “amante”. Y es que, claro, la panelista es amiga de la mujer señalada como la "tercera en discordia".
La rubia ama viajar.
Se trata de Paula, una joven misionera que vive en Pilar y es amante de los animales. “¿Una breve descripción de mi vida?”, se autopregunta en las redes sociales. “Momentos lindos, momentos tristes, divertidos, amistades y viajes”, detalla.
Muestra su gusto por lo caro: carteras y zapatos de primeras marcas.
Y, a juzgar por sus fotos, la rubia que le habría robado el corazón al ex marido de Soledad Solaro tiene muchas millas acumuladas: conoce Estados Unidos, México y Dubai, entre otros países.
Es fanática de los animales.
Es coqueta y fanática del animal print. Muestra sus lujosas carteras Louis Vuiton y sus zapatos Louboutin, una de las perdiciones de Wanda Nara, cuyo valor no baja de los dos mil dólares el par.
A los besos con Leonardo.
Aunque evitó publicar fotos junto al empresario, Paula no ocultó las últimas semanas su malestar emocional que podría coincidir con el fin de su affaire con Squarzon.
De noche y con amigas.
“La gente tóxica te oscurece el día, te vuelve pesimista y te atrapa en un mundo sin alegría, ni esperanza. Siempre se queja, habla mal de todos, tiene mal humor o se enoja cuando a alguien le va bien”, disparó el miércoles.
Junto a la periodista Greta Rodríguez.
La crisis con Leonardo se habría desatado el miércoles 24, cuando “Pau” anunció desde su muro de Facebook: “Borrando todo lo que no me suena y sólo resta”.
Lomazo.
Desde entonces, sus posteos se tornan ambivalentes: por momentos se muestra melancólica y, por otros, celebra sus noches con amigos, asado y música en su casona de Pilar. ¿Mensajes para Granata y Squarzon?