Después de una década de relación, Alejandro Fantino y Miriam Lanzoni decidieron tomar caminos separados y confirmaron su ruptura definitiva.
Chocolino, el eje de la discordia entre Fantino y Lanzoni.
Y si bien la decisión se tomó en un marco maduro y pacífico, hay un foco de conflicto inusitado en el proceso de separación: la tenencia de Chocolino, el caniche de la pareja.
Fantino y Lanzoni confirmaron su separación hace unas semanas.
"En ese punto está re tirante la relación", le confesó Lanzoni a Ciudad.com.ar. "Era mío el perro pero Ale se lo adueñó. En el departamento, Chocolino está muy triste. Se da cuenta de todo y está todo el día tirado en el piso, depresivo y mirando al horizonte", agregó en referencia a su nuevo hogar de soltera.
"Cuando vamos a Tigre, para él es una fiesta. Allá vive Ale y yo voy a visitar a los otros perros que quedaron con él, William, Ramsés, Negrita, Gandalf y la lora", detalló la actriz.
Así, Chocolino se ha convertido en el eje de varias discusiones entre Lanzoni y Fantino. "Ayer me dijo, 'vamos a tener que negociar la tenencia de verdad'", reveló ella.
Sin embargo, Miriam se encargó de aclarar que entre ella y el conductor televisivo no hay nada más que cariño y buenos recuerdos. "El amor está intacto pero esa nueva persona que va creciendo al lado tuyo o en la que se va convirtiendo el otro a veces no compatibiliza con la que sos vos en ese momento", explicó.