23 Febrero de 2017 17:32
La primera confesión de María Eugenia Ritó en relación a la presencia de las drogas en su vida se remonta al 2014. En aquel entonces, la detención de "narcomodelo" Zahina Rojas puso en escena a la vedette como una de sus clientes más fieles.
Ritó tiene una larga historia de recaídas en su adicción .
"Tuve excesos en mi vida, estoy muy arrepentida", admitió en aquel entonces Ritó en Infama. "Me hizo mucho daño, y tal vez al estar sola fui más débil. Tengo la suerte de poder hacer terapia, dos veces por semana y poder salir de eso. Lo estoy haciendo. Si me aferré a eso es porque estaba muy mal".
Confundida
Y si bien en febrero de 2014 María Eugenia se internó en una clínica de rehabilitación, meses después cronistas de la revista Pronto la filmaron en actitud confusa en la vía pública. "Yo me fumaría un porro", declaraba en cámara.
Días después, sin embargo, desmintió haber consumido drogas. "Yo siempre me hago estudios de cocaína y marihuana y este fin de semana me dio negativo. Si estuviera consumiendo saltaría a la vista. Hace siete meses que estoy limpia y puedo dar fe con los análisis", se defendió en Este es el Show.
Alcohol ¿y magia negra?
En junio del año pasado, Ritó volvió a ser noticia cuando admitió una recaída. "Tuve miedo. Por la inseguridad de que pueda ser mayor recurrí por propia voluntad a la clínica Carpe Diem, donde había hecho el tratamiento", contó en Intrusos.
Sin embargo, en octubre salió a la luz otro video que la mostraba bajo la aparente influencia de alguna sustancia a la salida de un boliche. “Mañana me van a ver muerta", se la oía gritar en plena calle.
Aquella vez, la vedette culpó al alcohol. "Ese día salí, tome un par de copas de más como cualquier ser humano, pero estaba al lado de mi pareja. Estaba sacada con todo lo que venía pasando, el dejar de consumir. Y me habían dicho que me habían hecho magia negra", explicó.