Inmediatamente reconocible por sus papeles de dama madura elegante y sobria, la actriz Lucrecia Capello falleció hoy a los 77 años, dejando atrás una carrera de cuatro décadas.
Lucrecia Capello comenzó su carrera como docente.
Su vocación no comenzó sobre el escenario sino como docente, enseñando teatro no sólo en nuestro país sino también en Guatemala, El Salvador y Estados Unidos. En 1977, mientras tanto, le llegó el debut cinematográfico en el filme Saverio, el cruel.
"Así como de nena fantaseaba con bailar, a los 25 años no tenía muy claro el camino", le contó una vez Capello a Clarín. "Terminado el colegio, sentía que el proyecto era estar enamorada únicamente y a eso me dediqué un tiempo. Y una vez, en el local de mi papá, me crucé con un proveedor que era actor de Nuevo teatro, nos pusimos a charlar y me dijo '¿Por qué no te das una vuelta por ahí para que te vean Alejandra Boero y Pedro Asquini (fundadores del emblemático grupo)?'. Fui y fue tan fuerte lo que sentí, que nunca más me fui".
De Chiquititas al teatro
Su rostro se hizo conocido para públicos de todas las edades: participó en series juveniles como Chiquititas, pero también en obras teatrales y en éxitos populares como Gasoleros, Montecristo y El elegido, que significó su último papel televisivo en el 2011. El trabajo final de Capello fue en el cine, más precisamente en la película Las chicas del tercero.
Sus problemas de salud comenzaron hace tres años, cuando fue hospitalizada de urgencia por una hemorragia gástrica. En mayo de este año, mientras tanto, la Asociación Argentina de Actores lanzó un pedido de donantes de sangre para la actriz, internada en el Sanatorio de la Providencia.