El sábado 31 de marzo de 2018, Natacha Jaitt estuvo como invitada al ciclo que conduce Mirtha Legrand los sábados por la noche por la pantalla de El Trece. La intención de la producción, encabezada por su nieto Nacho Viale, era que la modelo y actriz hablara de la red de abuso de menores que se destapó en el Club Atlético Independiente aquel año.
Pero Jaitt no solo se refirió a aquel caso, sino que también intentó salpicar, sin pruebas, a diferentes famosos. Dando sus iniciales o pistas de sus nombres, los acusó de estar vinculados a la red de pedofilia en el club de Avellaneda. Sus dichos provocaron un escándalo, provocando que decenas de medios cuestionaran a la diva y a su nieto.
La principal queja fue hacia Mirtha, por haber permitido que Natacha hiciera semejantes declaraciones. "La televisión argentina está muy salvaje. 'Por un punto de rating se mata a la madre', dije alguna vez hace mucho tiempo en Canal 7. Y yo caí en eso. Siento que les hice daño a muchas personas. Espero que crean mis palabras", sostuvo Mirtha al respecto.
En su descargo, la diva de los almuerzos reveló que tras aquel programa se "sintió morir" y que durante la semana debió ser tres veces atendida por su médico personal porque se sentía muy mal por lo ocurrido. Lo cierto es que a más de un año de aquella aparición de Natacha, dos diputados pidieron que Mirtha y Nacho declaren en el Congreso.
Los diputados nacionales Leopoldo Moreau (Unión Ciudadana) y Rodolfo Tailhade (Frente para la Victoria) hicieron este pedido ante el presidente de la Bicameral de Inteligencia del Congreso de la Nación, Juan Carlos Marino, para que citen a declarar a la diva y a su nieto, acusados de ser parte una operación de inteligencia ilegal durante esa emisión.
La solicitud también expresa el llamado para la ex espía, Ana Polero, y Mercedes Ninci -quienes estuvieron como invitadas en el programa esa noche- y para Gustavo Vera y Carlos Pagni, a quienes la fallecida mediática acusó de tener vínculos con redes de abuso sexual infantil.
Nacho Viale está acusado de armar esa mesa para que los servicios de inteligencia operen, asegurando que Polero le dio letra a Natacha detrás de cámara. Cabe recordar que el fiscal el fiscal Juan Pablo Curi le había solicitado al juez federal Alejo Ramos Padilla que el productor y La Chiqui fueran a declarar en calidad de testigos en la causa de espionaje ilegal.
En esa línea, el juez de Dolores resolvió que el planteo de Curi pase a ser parte de los “legajos de prueba”, por lo que la conductora y el productor no fueron llamados a declarar, al menos, en lo inmediato. Para los diputados Moreau y Tailhade, en el programa se llevó a cabo una “operación de inteligencia ilegal”, algo que Mirtha desmintió al otro día.
“No sé lo que son las operaciones. No entiendo nada de todo eso. Nuestra mesa no responde a ningún sector en particular. Que toda esta alteración mediática no nos haga perder el foco de la denuncia”, había dicho la conductora por aquel entonces.
Los legisladores también pidieron que la Agencia Federal de Inteligencia (AFI) les envíe toda la información sobre los agentes Eduardo Miragaya y Carlos Sidrás, que figuran como interlocutores de una serie de mensajes de texto con un asesor de Lázaro Báez, argumentando que esto demostraría que el organismo intervino y manipuló distintas causas judiciales en curso.