06 Noviembre de 2017 13:46
Karina Jelinek se enamoró rápido de Leonardo Fariña, pero no duró demasiado el idilio. Se conocieron a finales de febrero de 2011 y dos años y tres meses se separaron. En aquel momento, tras anunciar su separación, comenzó una batalla legal para dividir las propiedades y ganancias de la pareja.
En la pelea por repartir la fortuna con la que la morocha esperaba salvar su futuro, salió a la luz una extraña compra venta de un terreno de un campo en Mendoza que Fariña no pudo explicar ante la Justicia y por lo que como resultado, terminó preso. Se lo acusa por evasión agravada y, tras cumplir dos años de cárcel, fue liberado, beneficiado por la figura de "arrepentido".
Karina volvió a complicar a Fariña.
Hoy la modelo se presentó ante el Tribunal Oral Penal Económico, y reafirmó que el campo de Mendoza era de Fariña y que recién se enteró de su tenencia al año de estar casada con él. No hay dudas de que la morocha busca alejarse de la imagen negativa que ganó su ex y, para eso, volvió a hundirlo con sus declaraciones.
En su momento, el valijero dijo que había comprado ese campo en diciembre de 2010 y lo pagó 5 millones de dólares. Dos años y medio lo vendió por 1,8 millones, en la misma moneda extranjera. No es que sea malo para hacer negocios, algo raro ocurría con dicha porción de tierra. Ésto último es lo que investiga la Justicia.
EL RECLAMO
En 2014, la dueña de la frase "Lo dejo a tu criterio", le reclamaba al mediático la mitad del dinero de las 3.500 hectáreas que había vendido. "Mis abogados lo sumaron en la división de bienes, es lo que corresponde", había dicho entonces, al iniciar los trámites de divorcio. Además, en ese tiempo contó que unas semanas previas a la ruptura habían evaluado vender el campo y el departamento que compartían en Palermo para comprar una casona en Barrio Parque.
Como si fuera poco, Jelinek detalló que su ex tenía un buen pasar. La modelo recordó que su ex tenía buenos autos y la llevaba a comer a varios lugares de nivel. Luego sumó que nunca había escuchado hablar del Grupo Austral del cual es titular Lázaro Báez.
Karina y Leo, en tiempos felices.
Incluso, la modelo sostuvo que mientras estuvo casada con el empresario no conoció a Báez. Aunque reveló que veía con frecuencia a Fabián Rossi, ex de Iliana Calabró.
"Era como su mandadero, su asistente, iba hasta al supermercado", declaró. En cuanto a Federico Elaskar, el ex dueño de la financiera SGI vinculada al lavado de dinero de las empresas de Báez, lo definió como "muy amigo" de Fariña.
Fariña, en un primer momento, había aseguró que el dinero se lo había dado Báez, y luego se desdijo. Señaló al empresario Carlos Molinari, quien también le pagó la boda con Jelinek.
La morocha recordó que tenían un buen pasar.
Entre otras de las frases demoledoras que aportó la morocha, perfiló a Fariña como una persona infiel. "No teníamos buena comunicación, en dos años de casados me fue infiel cinco veces", terminó Jelinek.