Allá por el año 2015, la Cámara del Crimen había confirmado el procesamiento sin prisión preventiva de Javier Bazterrica, conocido en los medios como "el Gigoló", por "estafa, amenazas y hurto agravado". En aquella oportunidad, se dispuso un embargo sobre sus bienes por $20.000.
El Gigoló saltó a una fugaz fama mediática cuando Adriana Mendoza, hermana del coréografo y productor teatral, Flavio Mendoza lo denunció penalmente por estafa, por la suma de cinco mil dólares que Bazterrica le habría dicho de invertir en la Bolsa, en una causa que tramitó en el Juzgado de Instrucción N° 31.
Luego de conocido ese caso, se supo que Bazterrica también tenía una denuncia de 2013 realizada por María Fernanda Vergaram, una joven rosarina, quien lo señaló como presunto estafador y lo acusó de robarle 82 mil pesos.
En mayo de este año, Bazterrica fue condenado en Rosario a un año de prisión en suspenso al ser hallado culpable por el robo de esos 82 mil pesos a la joven de la ciudad con la que estaba conviviendo luego de que se cerrara la venta de un inmueble de su familia política.
La historia de amor entre ambos se complicó cuando la joven de 24 años recibió parte del dinero por la transferencia de un departamento a nombre de su tía y el falso polista le había dicho que debían reinvertir el capital y se ofreció para manejar la plata que guardaban en un neceser.
Su por entonces novia, descubrió que faltaba parte del efectivo que le había confiado. A partir de ahí, la rosarina se contactó con otras víctimas de Bazterrica y al confirmar sus sospechas, confrontó al falso polista. El reclamo pasó a manos de la Justicia penal luego de que la mujer denunciara haber recibido golpes y amenazas de parte de “el Gigoló”.
Ahora, la causa original -la que tramitó la familia Mendoza- sumó un nuevo capítulo: la querella encabezada por la hermana del integrante del Bailando por un sueño solicitó una pena de “3 años” para Bazterrica por los delitos de "estafa, amenazas y hurto agravado".
Además, en la resolución comunicada esta tarde, los querellantes también pidieron que el mediático fije domicilio real durante dos años. En el transcurso de ese tiempo también deberá presentarse en forma periódica ante las autoridades judiciales y cumplir con otras reglas de conducta.
A partir de estas denuncias -y tras ser increpado por Flavio Mendoza en el ciclo de El Trece, El Diario de Mariana- Javier Bazterrica había adquirido una breve fama que le permitió pasear por los pasillos de algunos canales de televisión con la intención de responder a las acusaciones y limpiar su imagen.