29 Mayo de 2015 05:43
Siempre se dice que el mundo de la farándula y el de la política se vinculan y Verónica Ojeda lo confirma. La ex pareja de Diego Maradona sigue con el bozal legal que le impide mencionar el nombre del padre de su hijo (lo que causó una pelea entre Maradona y Marcelo Tinelli), pero ese obstáculo no la frena para contar detalles de la relación que mantuvieron durante ocho años.
Su etapa con El Diez le generó contactos en la política. En los pasillos de Ideas del Sur, donde participa de Bailando por un sueño, dialogó con BigBang y contó sobre sus “amistades políticas”.
Ojeda con su vecino y amigo Alejandro Granados.
“De tantos años vividos con mi ex pareja tengo mucha relación con los políticos. Tengo amigos en la política. Sobre todo con Alejandro Granados (quien fue intendente durante 18 años en Ezeiza y hoy es ministro de Seguridad bonaerense) y Dulce, su esposa, con quien tengo una buena relación. Hablamos y cenamos juntos. Creo que hizo las cosas bien porque donde vivimos hay seguridad”, dice.
Diego y Verónica, una relación de idas y vueltas.
Sin ánimos de decir una cosa por otra, Ojeda aclara que con el resto de los políticos que conoce habla sin problemas. “Con algunos no es amistad, cuando los veo tengo una buena relación. Pero sólo es si los veo de casualidad”, asegura.
Con su hijo, en la pileta de su casa de Ezeiza.
La madre del pequeño hijo de Maradona toma en serio su participación en el programa “Bailando por un sueño” y ensaya sin parar para cada ritmo. No sólo es por evitar quedar sentenciada sino que por una cuestión de “respeto”, igual a lo que siente por la política.
“Tanto a la farándula como a los políticos le tengo mucho respeto y por eso nunca tuve ningún problema”, finalizó. Mientras tanto, Diego anuncia su boda con Rocío Oliva, íntima enemiga de Ojeda.