Cinthia Fernández decidió irse a vivir a Ecuador en abril de este año, para acompañar a su marido, Matías Defederico, en un nuevo comienzo futbolístico. Ahora, la familia está de vacaciones, y por unos días volvieron a la Argentina para reencontrase con sus familiares.
Invitada al piso de Intrusos, la bailarina se presentó con las niñas, y con su típica picardía, volvieron locos a todos.
Cinthia Fernández se mudó a Ecuador con su familia desde hace tres meses.
"Me vine por un mes a arreglar muchos problemas de mi casa, porque me mudé antes de irme y quedó todo colgado", contó Cinthia, al mismo tiempo que aseguró que está feliz en Ecuador, pero que extraña mucho a sus amigos.
A raíz de eso, la modelo explicó que su marido tuvo varias ofertas interesantes, y que no descartan la posibilidad de volver a la Argentina.
Además, aclaró que aunque en el país central viven tranquilos, la realidad es que a sus hijas les cuesta amoldarse a sus costumbres: "La nenas no se adaptaron al jardín, porque son tan inquietas que ningún nene quiere jugar con ellas". "Los chicos se asustan, porque son tranquilos", precisó.
Lo cierto es que las palabras de Cinthia fueron comprobadas rápidamente, cuando las nenas empezaron a correr de lado a lado por todo el estudio, y lejos de sentarse a escuchar a su mamá hablar, se volvieron las protagonistas de la entrevista con sus gritos y monerías.
Entusiasmado con la alegría de las niñas, Jorge Rial se sumó a la diversión de las pequeñas, quienes ya se habían encargado de desordenar todo el estudio de televisión, y tras varios juegos, terminó por despedir y felicitar a la bailarina por la familia que logró formar.
Finalmente, a pesar de que las chicas se mostraron llenas de energía, la morocha no dudó en asegurar que todavía tiene ganas de ir por otro hijo más. "Quiero tener uno más, para buscar el varón", cerró.