16 Octubre de 2019 18:07
Los restos de Cacho Castaña, que falleció ayer a los 77 años en un sanatorio del barrio de Palermo, abandonaron pasadas las 13 el edificio de la Legislatura porteña, donde fueron velados y finalmente despedidos por familiares y amigos, para ser trasladados al cementerio Jardín de Paz de la localidad de Pilar, lugar en el que se realizó su inhumación.
Durante el cortejo en el céntrico edificio porteño, el féretro se mostró cubierto por una camiseta de San Lorenzo de Almagro, club de los amores del cantante. Pasadas las 13 horas, el mismo abandonó a través de su puerta principal de la avenida Diagonal Sur el lugar, donde lo despidieron entre aplausos y lágrimas una decena de fanáticos y una nutrida guardia periodística.
Humberto Vicente Castagna, “Cacho de Buenos Aires”, falleció ayer al mediodía por una infección generalizada que se le desató bajo el cuadro grave de Enfermedad Pulmonar Obstructiva Crónica (EPOC), que había deteriorado su salud en los últimos años.
Atentos a la condición de personalidad destacada de la Cultura de la Ciudad que Cacho ostentaba desde 2008, las autoridades de la Legislatura porteña ofrecieron los salones del edificio para realizar el funeral, que se hizo desde ayer a la tarde hasta la medianoche y desde las 8.30 de la mañana de hoy hasta el mediodía.
Desde las 19 comenzaron a llegar a la capilla ardiente montada en el Salón Presidente Perón parte de la familia del artista, entre ellos, su mujer Marina Rosenthal, y amigos cercanos como el ex entrenador Alfio "Coco" Basile, Mónica Gonzaga y Adriana Varela.
El mundo de la política estuvo representado por el presidente Mauricio Macri, el ex primer mandatario Eduardo Duhalde, y el vicejefe de gobierno Diego Santilli. Además, se acercaron a darle su último adiós distintas figuras de los medios y la cultura popular como Oscar González Oro, Héctor "Bambino" Veira, Valeria Archimó, Nacha Guevara y Ramón "Palito" Ortega, entre otros.
Sus amigos y familiares acompañaron la caravana hacia el cementerio de Pilar, que tuvo una parada muy emotiva: el Café La Humedad, de Carlos Calvo y Alberti. Los seis autos que formaron el cortejo llegaron finalmente hasta el Jardín de Paz y allí, adentro, sólo lo acompañaron algunos de sus amigos más cercanos: Coco Sily, Gustavo Sofovich y Guillermo Coppola.