Una historia de amor que terminó en dolor y traición. Verónica Ojeda y Diego Maradona se llevan muy mal. Y esto queda expuesto cada vez que el ex capitán de la Selección argentina visita el país y no se hace un lugar en "su ajustada agenda" para estar con el pequeño Dieguito Fernando (3), hijo que tuvo con la ahora vedette el 14 de febrero de 2013.
En las últimas horas, Verónica no pudo contener su bronca y se descargó contra el padre de su hijo ¿Qué pasó esta vez? Diego vino a Buenos Aires, se reencontró y reconcilió con sus hijas Dalma y Gianinna, fue a ver la Copa Davis con Rocío y su nieto Benjamín. Y, como de costumbre, prometió que iba a visitar a Dieguito, pero no lo hizo.
¿Por qué Diego no vio a su hijo? Después de ocho meses, Maradona se había comprometido a enviar el viernes 20 de enero un avión privado a Mar del Plata para que recogiera a su hijo de tres años y disfrutar así de un reencuentro en la casona familiar de Devoto.
A pesar de que estaba todo arreglado, un "incidente" impidió el encuentro. Y la grieta se volvió a abrir. De un lado, sostienen que Diego reprogramó el viaje para el sábado y luego se ausentó por "haberse pasado de copas la noche anterior". Del otro, acusan a la madre del pequeño impedir el contacto con excusas e imposiciones "imposibles de cumplir".
El pequeño quedó en medio de la pelea entre sus padres.
Enojada por la promesa incumplida, Verónica se descargó por Instagram e hizo un polémico posteo donde metió a su hijo en el medio: publicó una foto con un mensaje, donde hace de cuenta que el que habla y critica las actitudes de Maradona es el pequeño.
Una foto publicada por Veronica Ojeda (@veruojeda25) el 5 de Feb de 2017 a la(s) 11:48 PST
"Mi mamá es una mujer tan valiente, luchadora y maravillosa que no tuvo miedos ni reparos cuando tuvo que convertirse también en mi papá. Por eso digo: mi mamá es el mejor papá del mundo", reza la frase junto a una foto de Dieguito en brazos de Verónica.
La última visita
El "Diez" y Dieguito se vieron por última vez el sábado 25 de junio de 2016, una semana después del festejo por el día del padre. En ese entonces, Maradona había viajado a Argentina para pasar un mes en el país. Se instaló en Nordelta y visitó a todos sus hijos, entre ellos a Jana.
Por ese entonces, Maradona todavía no había reconocido a Diego Jr. Lo hizo el 25 de agosto de ese mismo año, tras 29 años de rechazo y dolor.