Cuando parecía que Mica Viciconte le había puesto punto final a sus conflictos y las peleas mediáticas de las cuales solía sostener cotidianamente por cualquier motivo que suceda y que no le caiga bien, volvió a encender la mecha de manera inesperada: contra Natalie Weber. El motivo es aún más insólito porque no refiere a un encontronazo entre ellas, sino más bien por algo que sucedió hace años, como lo fue el Zarate-gate cuando el jugador decidió dejar Vélez Sarsfield para jugar en Boca Juniors.
Los últimos conflictos en puerta que tuvo la ex Combate fueron siempre apuntados a la misma persona: Nicole Neumann. Es que a pesar de contar con un prontuario de peleas con distintas modelos e influencers, las más fuertes fueron sin dudas con la blonda por la relación con Fabián Cubero, que culminó de la peor manera a través de la Justicia, a tal punto de que en este momento, ninguno puede hacer mención del otro ni en los medios de comunicación ni en ningún otro lado.
Pero ahora, la alarma se volvió a encender con un insólito cruce entre ambas botineras por un suceso que pasó hace años y que fue sin dudas uno de los más polémicos dentro del fútbol argentino: el traspaso que hizo Mauro Zárate de Vélez a Boca, luego de declarar que en Argentina, no jugaría en otro club que no sea en el del Fortín.
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En su momento, Viciconte había opinado que lo que había hecho el marido de Weber era no tener “palabra” y que sin dudas defraudó a los miles de simpatizantes de Vélez, que confiaron en lo que el delantero había prometido. Pero la pregunta es: ¿Por qué se encontraron en esta pelea? Es que justamente la deportista es la pareja de Cubero, uno de los referentes del Fortín y quien debió poner la cara en más de una ocasión cuando Zárate hizo todo lo contrario.
Entonces, para defender un bando y el otro, ambas se encontraron enfrentadas por una situación que si bien no tenía nada que ver con ellas, sí dejaba expuestos en el medio a sus maridos dentro del club de fútbol. Si bien la pelea fue tiempo atrás, las aguas volvieron a reanimarse porque Weber criticó sin vergüenza a Cubero, diciendo que él “habla de más” en los medios sobre sus problemas personales y que debería ser un poco más conciso.
Tras ser consultada por Socios del Espectáculo sobre los dichos de la modelo, Viciconte contestó: “Ninguno de nosotros puede hablar (por una cuestión judicial)” y sumó: “Lo de Natalie es una obviedad. ¿Quién es el marido? Bueno, no sé si están juntos pero, ¿quién es el marido?”, dando a entender que la pelea parte de raíz por todo el inconveniente y la traición sucedida con el club de Liniers.
Y, totalmente enojada con la situación, volvió a subrayar su opinión dejando en claro que el delantero no tuvo en cuenta sus palabras y se aprovechó del sentimiento de los simpatizantes para traicionarlos. “Yo hice una nota donde dije 'si alguien promete y después por la plata te cambias de equipo'... Está buenísimo porque por la plata todos trabajamos, pero entonces tus palabras no sirvieron”, detalló.
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En esa misma línea, constató desde dónde viene la problemática y que, si bien hace mucho tiempo no se hablaban, dejó en claro que hoy la modelo volvió a encender la mecha justamente porque no tiene otra cosa para hacer dentro de los medios, en donde hoy se jacta de panelista. “Natalie me agarró bronca como si yo hubiera hablado mal de él. Fue una opinión personal y a ella no debería molestarle, a partir de ahí tira palos porque no tiene otra cosa, entonces bardea y bardea”.
Por último, concluyó con un comentario letal y hasta le recomendó a la esposa del ex Boca que intente dejar de hablar de las personas y emprender un camino en dónde sólo se tenga que fijar en ella misma. “No tienen vida. Es más fácil bardear sin saber la realidad. Yo creo que ella debería enfocarse en su vida personal y no tanto en la de los demás”.
Sin embargo, esta discusión dejó una clara conclusión en puerta y es que nuevamente en el ambiente del fútbol se centra el foco del combate entre dos mujeres que se acusan y se señalan justamente por problemas de sus maridos, mientras que ellos las escuchan en la televisión y deciden hacer oídos sordos: que se peleen entre ellas.