Es un torbellino, un huracán ruidoso que por donde pasa jamás lo hace de manera desapercibida, llamando la atención de todos, grandes y niño, o como en éste caso, ancianos: Victoria Xipolitaki “perturbó la paz” en un hogar de ancianos de la ciudad de Mar del Plata. La vedette pasó la tarde del miércoles con los abuelitos del geriátrico, quienes entre música, risas, festejos compartieron una jornada “fuera de control”.
“Fue Una tarde diferente llena de amor”, afirmó la rubia entusiasmada a Bigbang. La Griega, de novia con el dirigente camporista José Ottavis, lució zapatillas deportivas, un vestido negro, bastante sobrio para los típicos escotes que ostenta, y un peinado recogido que recordó a muchos el look característico de Evita, la mujer de Perón y emblema del justicialismo.
“Me querían conocer y fui de sorpresa, con medialunas para todos”, relató. La visita coincidió con el cumpleaños 84 de Horacio, uno de los abuelos del hogar, quien fue sorprendido por Xipolitakis al aparecer con una torta y luego hacerlo pasear con su silla de ruedas por todo el lugar. La Griega recorrió todo el hogar y saludó a cada uno de los ancianos, y muchos agradecieron emocionados su presencia. “Yo no soy nadie y el amor que me llevé ayer fue impresionante”, declaró.
“La vida me dió mucho amor. Esta vez me tocó a mi y fui a darles una sorpresa” indicó conmovida. “En realidad, hice lo mejor que sé hacer yo: dar felicidad”, argumentó. Además, en su relato destacó un hecho “casi milagroso”: contó que gracias a su visita, una abuelita de 105 años salió de su cuarto luego de negarse a salir durante 20 años.
“Sin dudas mi mejor verano: sin escándalos y llena de amor”, concluyó Xipolitakis desde Mar del Plata, donde comparte sus días con Ottavis.