28 Noviembre de 2015 06:27
Wanda Nara decidió seguir los pasos de su esposo, Mauro Icardi, y le rindió un homenaje a su hija Francesca en Italia. Con el objetivo de mostrar el amor que le tiene a su hija de diez meses, la modelo llamó a su tatuador de confianza y le pidió que le plasme el nombre de la pequeña en la piel. Amante de las redes sociales, la rubia no se resistió a la tentación de subir la foto a web, con un detalle: en la imagen se ven 5 pulseras Cartier de 47 mil dólares cada una.
La rubia, que se tomó el trabajo de diseñar el tatuaje, eligió dibujarse el nombre de la niña en negro y cursiva. Por supuesto, el lugar de su cuerpo elegido para hacérselo fue bien visible: el antebrazo derecho. Luego de sesión, la ex vedette mostró el resultado final en las redes sociales y recibió una cataratas de críticas por la ostentación de su “homenaje”. 250 mil dólares en pulseras es demasiado para muchos usuarios de las redes, que lo hicieron notar.
Sus seguidores, indignados con la situación, comentaron: “Una de esas pulseras podría arreglarme varios meses de vida”, “El amor a los hijos no se mide por los tatuajes”.
Pero la modelo no sólo lleva el nombre de la hija que comparte con el jugador del Inter. La ex vedette también tiene tatuados los nombre de los tres hijos que tuvo con Maxi López, Valentino (6 años), Constantino (4 años) y Benedicto (3 años).
En el 2012 se tatuó el nombre de sus tres hijos.
La provocación
Cabe recordar que Icardi fue el pionero de esta moda. Con la intención de demostrar el cariño que les tenía a los tres hijos de la modelo, se tatuó el brazo izquierdo con sus nombres. Esto generó la bronca del jugador de Maxi López, padre de las tres criaturas.
Este es el tatuaje que se hizo Icadi en homenaje a los tres hijos de Wanda.
Y siguen las provocaciones
Como si fuese un juego que les divierte, la pareja se dedica a “molestar” constantemente al ex delantero de River. Esta vez el protagonista de la novela fue el “nueve” de Inter, que decidió diseñar sus nuevos botines Nike HyperVenom II de una manera muy particular: a uno de sus botines le colocó el nombre de los tres niños, situación que irritó al ex de Wanda, que en confesiones anteriores aseguró: “que este pendejo no se haga el padre, son mis hijos”.
