27 Julio de 2016 03:00
Las ventas del iPhone cayeron por segundo trimestre consecutivo: la mayor compañía del mundo, y el segundo mayor fabricante de smartphones del mundo, confirmó este martes que entre abril y junio vendió 40,4 millones de iPhone, lo que representa un 15% menos que hace un año.
También bajaron las ventas de iPad (10 millones, un 9% menos que hace un año, y acumulando diez trimestres consecutivos de contracción de ventas) y de Mac; 4,3 millones, un 11 por ciento menos que en el mismo período de 2015.
Una de las tantas imágenes que circulan del iPhone 7.
La compañía está lejos de estar en problemas económicos, con US$ 231.000 millones en el banco. Pero aún así el iPhone es un producto clave (representa casi dos tercios de su facturación), así que hay mucho interés en lo que sucederá con el próximo iPhone 7, que ya tiene fecha de salida: el 16 de septiembre, una fecha típica para la compañía, según Evan Blass, que suele tener información muy precisa.
Cuestión de nombre
Pero algunos rumores indican que no se llamará iPhone 7 sino iPhone 6SE 8 (¿será?). También, que se ofrecerán en dos versiones (algunos rumores indicaban tres).
La diferencia entre uno y otro modelo, más allá del tamaño de la pantalla, estará en la inclusión (con el modelo Plus) de una cámara trasera doble, un concepto similar al que tiene Huawei con su P9, HTC con el One M8 y LG con el G5, entre otros modelos. No está claro cómo funcionará: si tienen diferentes ángulos de visión, como el G5; si una es color y la otra monocromática, como el P9; o si una sirve para medir la profundidad de campo y ayudar con el foco, como el M8. O si usarán la tecnología de LinX, una compañía que Apple compró en 2015 y que permite combinar fotos usando sensores con lentes de diferente apertura para obtener un zoom óptico compacto.
Más allá de eso, y de un leve cambio estético (desaparecen las líneas de plástico en la parte trasera, donde iban hasta ahora las antenas), el otro punto estético diferente estará en la cámara del iPhone de menor tamaño, que tendrá un diámetro mayor al actual, según las fotos de algunas carcasas que están circulando por las redes sociales chinas. También se espera que pierda el conector analógico de audio, optando por auriculares que usan el conector Lightning.
El resto seguirá igual, o dentro de lo previsible: mismo tamaño y resolución de pantalla, procesador más veloz y una batería levemente mayor, que combinado con el procesador A10 ( más poderoso y también más eficiente en el uso de la energía) le permitirán una mejor autonomía al próximo iPhone.
Pocos cambios, mucha expectativa. ¿Habrá sorpresas o dejarán todo para el año que viene, cuando el teléfono más codiciado cumpla 10 años?
