Olores, sensaciones, movimientos en cine 4D y un espacio sin pantalla para ver películas en realidad virtual. Las nuevas salas de cine son una verdadera experiencia sensorial.
Las butacas se mueven y un sistema recrea las condiciones que se ven en la pantalla.
Desde que los hermanos Lumiere inventaron el cine, patentado el 13 de febrero de 1895, muchas cosas cambiaron. Sin embargo, la esencia y el pacto del público con la ficción sigue siendo el mismo. La magia continúa intacta. Y por más televisores 4k que tengamos en casa, nada supera la experiencia de ir al cine, que ahora se renueva.
Cada vez más dimensiones: el cine 4D
La tecnología quiere darnos cada vez una experiencia más real e inmersiva, como si ya no alcanzara con mirar una película y necesitáramos vivirla.
En esta búsqueda se inscribe el cine 4D. Básicamente, se trata de un sistema de proyección que recrea en la sala las condiciones que se ven (o viven) en la pantalla. Así, la sala podrá llenarse de niebla, sufrir una lluvia o ser azotada por un fuerte viento (habrá que llevar peine y piloto, por las dudas).
Las proyecciones también incluirán olores y vibraciones en los asientos. En cuanto a lo que se ve en pantalla, puede ser tanto el clásico 2D como el ya conocido cine 3D de los anteojitos. Más allá de la idas y vueltas a lo largo de los primeros cien años de vida del cine, ahora vuelve con más fuerza.
Lumma, es una empresa argentina que desarrolla la tecnología necesaria para estas salas. Y una primera experiencia se pudo vivir en " target="_blank">Tecnópolis, en una película de YPF. Aseguran que este año podría llegar a salas comerciales locales.
Las salas Multiplex de Palmas del Pilar cuentan con estas salas y está planeado que este mes se pudiera ver la parte 3 de la saga Kung Fu Panda en una de ellas, pero las entradas aún no están a la venta aunque la película se estrenará el 17 de marzo.
Tan virtual que parece real
La realidad virtual o VR como se la conoce por sus siglas en inglés está llegando a todos lados. Y en Amsterdam decidieron llevarla al cine inaugurando la primera sala VR.
Se trata de una sala de Samhoud Media, para 50 personas, a la que se le sacó la pantalla; cuenta con butacas especiales que giran para que el espectador pueda moverse y sacarle el jugo a la experiencia. Utiliza tecnología Samsung con lentes Galaxy Gear VR, que en su interior contienen un Galaxy S6. El sonido por su parte, llega a los asistentes a través de auriculares Sennheiser, un fabricante alemán.
La programación ofrece películas y documentales especialmente creadas para este formato con una duración de media hora. Además, también ofrecen una cartelera especial para niños.
El cine en tu casa, pero de verdad
Pero hay otra tendencia en ciernes: así como Netflix y otros servicios de streaming mataron a los videoclubes, una compañía quiere cambiar cómo accedemos a los estrenos. Hasta ahora, el camino es: estreno de una película en el cine, luego la disponibilidad en Blu-ray o por un servicio bajo demanda (algo que puede tomar meses, mientras los estudios pasean las películas por todas las salas de cine posibles), y luego en una videoteca genérica.
Pero según Variety, Sean Parker, uno de los creadores de Napster, quiere cambiar esto. La idea es que se pague un abono mensual (50 dólares en EEUU) y tengas acceso ilimitado a los estrenos de películas, en la propia casa y para ver en tu televisor de gran tamaño el día que se estrenan.
El sistema (llamado Screening Room) usaría un dispositivo relativamente económico para descargar el contenido y borrarlo una vez que se vió la película. Sería, literalmente, como tener un cine en tu casa, con todos los estrenos a un clic.