29 Agosto de 2015 12:27
Un grupo de investigadores de la Universidad Nacional de Río Cuarto (UNRC), en la provincia de Córdoba, desarrolla Vehículos Aéreos No Tripulados (VANT), también llamados drones, con tecnología propia que son utilizados para dar soluciones concretas como el monitoreo de incendios forestales o facilitar las tareas de fertilización y fumigación a los agricultores.
El ingeniero en telecomunicaciones, Pablo Solivellas, de 33 años, contó a la agencia Télam que "cuando empezamos en el mundo de los VANTs todavía no tenían en auge que hoy tienen en nuestro país gracias al abaratamiento de los modelos comerciales; nosotros nos metimos porque es una tecnología que integra sistemas inalámbricos, de telecomunicaciones, embebidos, y protocolos que engloban muchas de las cosas que estudiamos en la universidad".
"Una de las cosas que nos propusimos fue poder colaborar en la búsqueda de soluciones a problemas concretos, y en ese camino interactuamos con la Secretaría de Ciencia y Tecnología del gobierno cordobés para diseñar un VANT que le permita a los municipios del interior provincial hacer un monitoreo sobre incendios forestales", aseveró.
El aparato se puede utilizar en la lucha contra el fuego.
En ese sentido añadió que "también trabajamos junto al INTA y a investigadores de la Facultad de Agronomía de la UNRC en el desarrollo de un VANT que facilite la agricultura de precisión, permitiéndole a los productores tener datos detallados de sus campos para saber cuanto y dónde deben fumigar o fertilizar, para que ahorren tiempo y dinero".
Hernán Ponso, un ingeniero en telecomunicaciones de 31 años, indicó que "la tecnología de los VANTs se ha abaratado muchísimo en los últimos años, permitiendo que se vayan planteando nuevas aplicaciones que van más allá de la adquisición de imágenes; va a pasar como con las computadoras domésticas, que al principio nadie sabía para qué usarlas", apuntó.
El especialista señaló que "es probable que la parte más compleja de estos desarrollos sea el trabajo fino de configuración de detalles, porque a veces por un olvido mínimo el drone pierde estabilidad y terminamos juntando las piezas".
"El desarrollo de esta tecnología también debería ser una oportunidad de crecimiento económico para el país; hoy para construir un VANT hay que importar las baterías desde China o Estados Unidos, cuando esos proveedores extraen el material de una de las principales reservas de litio del mundo que está en el norte de nuestro país, y la verdad que hoy Argentina cuenta con la capacidad industrial necesaria para hacer esas baterías acá", finalizó.