En las calles. En los colectivos. En los parques y plazas. Y también puertas adentro: en escuelas, oficinas y casas. La locura por Pokémon Go no para en la Argentina. El juego de realidad aumentada llegó al país hace menos de una semana y ya hizo furor. Pero a diferencia de otras aplicaciones, ésta en particular cautivó a personas de todas las edades: desde los más chicos hasta los adultos mayores.
La efervescencia comenzó con los más jóvenes. Los adolescentes eran los que más estaban esperando el desembarco de la app en la Argentina. Pero la pasión por capturar pokémones comenzó a multiplicarse entre los más grandes. Tal vez lo más llamativo sea el caso de los adultos mayores, que también salieron a la caza, teléfono en mano.
El juego de realidad aumentada llegó al país la semana pasada y ya provocó furor.
Para la psicóloga Beatriz Goldberg, la pasión de los mayores tiene una explicación clara y concreta: el deseo de sentirse juvenil. “Estas cosas les da vitalidad, tienen la sensación de juventud, sienten que todavía están en carrera, que pueden competir”, remarcó la licenciada en psicología y escritora.
Pero Pokémon Go provocó una sensación que otras aplicaciones no habían logrado. Si bien son cada vez más los mayores de 60 años que se pueden adaptar a los cambios en la tecnología y su constante evolución, muchos otros se quedaron afuera. En este sentido, para la psicóloga existe cierto rejuvenecimiento al utilizar una app de estas características. “No es como estar estático en una computadora, sino que da la idea de que existe movimiento y actividad física”, analizó Goldberg.
Consultada por BigBang, la psicóloga sostuvo que es normal observar adolescentes y jóvenes con el teléfono en plena búsqueda. “Es habitual que pase esto. Ellos corren, se mueven, se divierten, lo hacen en grupo o solos”, consideró.
En cambio, manifestó que en caso de los mayores, el juego permite medir cierto grado de juventud, de “estar en onda”. “Algunos se miden, como se hace también cuando van a jugar al fútbol”, comparó Goldberg.
No es para nada llamativo que la aplicación del ya histórico dibujo animado haya provocado cierta pasión en todas las edades. Para muchos, puede compararse con el furor que provocó Facebook o Whatsapp, que luego se instalaron y ya son parte de lo cotidiano. En el caso de Pokémon Go, para la psicóloga y escritora es necesario analizarlo teniendo en cuenta ciertos límites: “Es saludable que jueguen los más grande siempre que rejuvenezca, pero sin alcanzar la obsesión”.
LA EDAD Y LOS INTERESES, EN EL FONDO DE LA CUESTIÓN
Todos lo han probado. Al menos una vez, para saber de qué se trata. Si no lo hicieron con su teléfono, se lo pidieron a un amigo. A esta altura, con tantos avances tecnológicos al alcance de la mano, sería incoherente pensar que pueda existir un rango etario que se quede totalmente afuera.
Si bien los adolescentes son los que más juegan, quienes están entre los 30 y los 40 años también tienen una fuerte participación del juego. “Ellos son los que están más pendientes de todo lo actual, con la moda. Antes que salga el juego, ya estaban al tanto de la locura que provocaría, y eso alimentó el deseo de jugar”, comentó la psicóloga a BigBang.
Para la psicóloga Beatriz Goldberg, a los adultos mayores el juego puede "rejuvenecerlos".
“Están los que siguen a la moda, los que se quieren sentir juveniles y los que no les importa. Entre tantos líos que hay en el mundo y en cada uno, este es un juego que te puede despejar. Por eso, muchos se sumergen y se abstraen”, relató la psicóloga.