08 Junio de 2016 21:28
Primero eran valijas imposibles de transportar, luego ladrillos, después la búsqueda del menor tamaño fue el norte para todas las compañías, pero no duró demasiado y volvieron los teléfonos más grandes. Parecía que en cuestión de formas y tamaños lo habíamos visto todo. Pero no.
Una nueva tendencia aparece de la mano de Samsung, que a fines del año pasado patentó un modelo de dispositivo que se enrolla y que, según aseguran fuentes no oficiales de la compañía surcoreana, estarían en el mercado en 2017. Como en un loop histórico volvemos al papiro, solo que en versión digital.
De acuerdo con los anticipos de la agencia Bloomberg, Samsung trabaja en Project Valley (tal como se lo conoce internamente en la compañía), un proyecto secreto que incluye dos modelos de dispositivo con pantallas plegables. Ambos usarían pantallas OLED (las que viene usando Samsung en sus teléfonos, y las que, dicen, tendrá el iPhone en un par de años).
¿Será así?
El lanzamiento incluiría un modelo que se dobla como si fuera un espejito plegable y otro con una pantalla de 5 pulgadas cerrado, que se desplegaría hasta alcanzar un total de 8 pulgadas al abrirse.
Samsung es el mayor proveedor de pantallas OLED en todo el mundo. Y esta apuesta le permitiría volver a liderar el mercado y quitarle usuarios a su gran competidora: la empresa de la manzanita que planea empezar a usar pantallas OLED en sus equipos.
Tanto Samsung, como su competidora LG, cuentan con pantallas POLED es decir, pantallas OLED fabricadas con un sustrato plástico que tienen un cierto grado de flexibilidad, pero no logran doblarse en dos como se supone que lo harían estos modelos.
No se trata solo de una pantalla novedosa, la compañía necesitará una interfaz que aproveche al máximo las posibilidades de la pantalla enrollable.
Mientras tanto en algún lugar de China...
Moxiphone.
En las tierras que recorriera Marco Polo, el Grupo Moxi, una pequeña compañía situada en Chongqing, China, anunció el lanzamiento de un teléfono capaz de doblarse hasta rodear la muñeca del usuario como si fuera un reloj pulsera.
La empresa asegura que ya cuenta con un prototipo y su plan es producir unas 100.000 unidades que se venderían en China a fines de este año, poco antes del supuesto lanzamiento de Samsung.
El equipo tiene una pantalla táctil flexible realizada en grafeno que funciona cuando está plana. El grafeno es el material más delgado del mundo, es fuerte, liviano, transparente y flexible. ¿La contra? En un principio las pantallas serán solo en blanco y negro. Para llegar al color, Moxi asegura que habrá que esperar hasta 2018.