El cofundador de Twitter, Jack Dorsey, anunció este miércoles que la red social no aceptará más publicidad política en su plataforma a nivel mundial, como respuesta a las críticas sobre las cuestionadas campañas de los funcionarios en las redes sociales. Según indicó Dorsey, la medida entrará en vigencia el 22 de noviembre de 2019, por lo que en los próximos días harán público un comunicado con más información.

"Hemos tomado la decisión de detener toda la publicidad política en Twitter a nivel mundial. Creemos que el alcance del mensaje político debe ganarse, no comprarse", sostuvo esta tarde en cuenta personal de Twitter Dorsey, quien agregó que tomaron esta decisión por varios motivos, y uno de ellos tiene que ver concretamente con que los usuarios veían publicidad política no porque seguían a una determinada cuenta o porque les interesaban algunos comentarios, sino porque detrás de la publicación había dinero que los partidos ponían para generar mayor alcance.

"Si bien la publicidad en Internet es increíblemente poderosa y muy efectiva para los anunciantes comerciales, ese poder conlleva riesgos significativos para la política, donde puede usarse para influir en los votos y afectar la vida de millones", sumó el cofundador de la red social.

Dorsey también sostuvo que a mediados de noviembre darán a conocer un documento mucho más detallado donde explicarán que permitirán y que no, mientras que definitivamente el día 22 del mes que viene la publicidad política en Twitter cesará.

"No se trata de libre expresión. Se trata de pagar por el alcance. Y pagar para aumentar el alcance del discurso político tiene ramificaciones significativas que la infraestructura democrática de hoy puede no estar preparada para manejar", indicó por último.

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En detalle, lo que intentan evitar desde la red social es que los políticos, con su publicidad, fuercen un mensaje que va en contra del pensamiento de la gente y de sus valores. Como el poder de Internet es enorme, muchas veces los anuncios engañosos pueden influenciar votos y cambiar la vida de las personas luego de una elección.

De este modo, lo que los partidos políticos deberán hacer ahora, es ganar seguidores y retweets por sus propios medios, lo que los llevará a generar una notoriedad entre los usuarios por lo que ofrecen y no porque detrás hay dinero.

Por su parte, hace unos días el CEO y fundador de Facebook, Mark Zuckerberg, se enfrentó a algunos legisladores de la Asamblea de Representantes, quienes originalmente lo citaron para discutir Libra, la nueva criptomoneda que quiere lanzar el gigante de las redes, pero luego le preguntaron sobre la publicidad política en su plataforma.

Una de las que lo enfrentó, fue la legisladora progresista Alexandria Ocasio-Cortez, quien lo cuestionó por permitir anuncios políticos con mentiras abiertas contra candidatos demócratas. 

En el último tiempo, Facebook ha sido señalado por aceptar millones de dólares de firmas como Cambridge Analytica, quienes difundieron fake news en la red social durante procesos electorales claves como la elección estadounidense de 2016, el Brexit en Reino Unido, y las elecciones mexicanas.