Big Bang! News
Más

Poné los pochoclos: tres películas en Netflix para ver el fin de semana que no te van a defraudar

Dos son producciones argentinas y la otra es del cine norteamericano independiente.

por Rafael Saralegui

30 Agosto de 2019 19:06
1567202625825
1567202625825

Es probable que te pase cada vez que te sentas frente al televisor junto a tu pareja para ver una película en Netflix. Empezás a ver las sugerencias que te ofrece la plataforma a partir de sus estrenos y producciones propias, combinadas con los antecedentes de tus gustos a partir de tus consumos anteriores. Y comienza la discusión, que está sí, que está no, y pasa el tiempo y no se ponen de acuerdo. Y hasta capaz que se genera una pelea por el control del control remoto. En fin. Pasa en las mejores familias. Con la idea de evitar una discusión acá vamos con tres sugerencias de películas para ver durante el fin de semana.

Las tres son muy diferentes, pero valen la pena. Y tienen un hilo en común. Las diferentes composiciones familiares en los tiempos que corren. Con diversas miradas y propuestos diferentes, pero siempre atrapantes.

El hijo

Un pintor, en cierta decadencia, está en pareja con una mujer más joven, científica, extranjera, pero radicada en Buenos Aires para llevar adelante sus investigaciones. Joaquín Furriel interpreta a Lorenzo, el pintor que vive junto a Ingrid (la noruega Heidi Toini). Todo empieza a cambiar cuando ella queda embarazada. Hace viajar a la Argentina a una mujer para que la ayuda en la crianza y cada vez se separa más del padre. Se crea un vínculo, por lo menos inquietante. La situación se pone tan complicada que Lorenzo termina preso. Entonces interviene una amiga abogada (Martina Guzmán), que fue su pareja años atrás y que lo acompaña hasta cierto momento. No vamos a contar más. La dirigió Sebastián Schindel, con quien Furriel ya había trabajado en El Patrón, otra producción que vale la pena. El guión está basado en un cuento del gran Guillermo Martínez, Una madre sobreprotectora.

El otro hermano

La dirigió Israel Adrián Caetano y los protagonistas son Leonardo Sbaraglia y Daniel Hendler. También está basado en un relato. Se inspira en Bajo este sol tremendo, hasta ahora la primera y única novela del talentoso Carlos Busqued. Cetarti (Hendler) es un muchacho que está al pedo todo el día, después de que los echaron de su empleo público. Hasta que recibe una llamada telefónica de Duarte (Sbaraglia) un ex suboficial de la Fuerza Aérea, quien le informa que su madre y su hermano habían sido asesinados por un camarada de armas, que luego se suicidó. Duarte le ofrece truchar unos datos para cobrar un seguro de vida por la muerte de la ex pareja de su madre. Y Cetarti agarra viaje. El final de la película difiere del final del relato de Busqued, pero no defrauda. Sbaraglia brilla alto con un rol de un personaje por momento repugnante.

Vida privada

“Una de las mejores y más realistas escenas de Vida privada muestra a sus personajes centrales Rachel (Kathryn Hahn) y Richard Grimes (Paul Giamatti) en la sala de espera de la clínica de fertilidad donde están intentando un nuevo tratamiento para lograr concebir. Sin hablar y casi sin cruzar miradas los intérpretes consiguen comunicar ese desgarrador espacio entre la esperanza y el temor de alentarla después de tantas frustraciones pasadas”, resume La Nación, en forma acertada. Rachel es escritora y Richard director teatral. Por motivos diversos decidieron postergar el momento de tener un hijo. Dirigida por Tamara Jenkins, la película muestra todos los caminos que emprende la pareja para lograr ese deseo postergado. Los tratamientos, los intentos de adopción, las peleas, la frustración. Es un buen ejemplo del cine norteamericano inteligente, no aquel que sale de las grandes factorías para mirar sin pensar, mientras nos llenamos de pochoclo.

10